A primeras horas del viernes, el huracán Hermine tocó tierra en Florida y se convirtió en tormenta tropical el sábado por la mañana.
Boniatos
Pese a que la tormenta tropical Hermine llegó a Carolina del Norte durante la cosecha de boniatos, la tormenta se presentó como una bendición para algunas explotaciones agrícolas. "Hermine dejó entre 10 y 13 centímetros de lluvia", indica Annette Chancy, de Millstream Farms, en Dunn, Carolina del Norte. "La lluvia detuvo la cosecha dos días, pero como antes de la tormenta tuvimos condiciones de sequía, pudimos reanudar las labores enseguida", añade. La lluvia hacía mucha falta a algunas explotaciones de boniatos en otras partes del estado cuyos cultivos no estaban listos para la cosecha.
La lluvia ha acabado beneficiando a la mayoría de los cultivos de boniatos de Carolina del Norte. "Sin embargo, las zonas más bajas pueden correr riesgo con la cantidad de lluvia recibida en tan poco tiempo", advierte Jeff Thomas, de Scott Farms. "Los daños en estas zonas podrían compensarse con los beneficios en otras", añade. Es difícil saber cuál será el efecto en los cultivos de las zonas más bajas hasta que comience la cosecha.
Los melocotones de Georgia van acabando
La temporada del melocotón en Georgia está acabando y si Hermine hubiese llegado dos semanas antes, los daños habrían sido cuantiosos. "Dos de nuestras explotaciones se vieron afectadas por el viento y la lluvia", subraya Benjie Richer, de Richter and Company. "Nos hacía mucha falta la lluvia, pero el viento hizo caer del árbol algunos melocotones", apunta Richter. "A fin de cuentas, los efectos fueron moderados. Nuestras pérdidas ascienden a unos dos camiones de melocotones que cayeron de los árboles".
Kim Flores, de Seald Sweet International, Florida, comenta que "exceptuando la lluvia, la compañía no se vio muy afectada por Hermine".