Los países del norte son los mayores consumidores de "berries" de Europa. En especial, el Reino Unido y Alemania consumen muchas "berries", por encima de un 10% más que otros países europeos. En la última década, estos productos han sido los más valiosos de la categoría hortofrutícola en Europa.
Los frutos rojos han superado al resto de frutas y hortalizas frescas en términos de crecimiento. En 2015, las "berries" triunfaron en el Reino Unido, el principal mercado de Europa en términos de valor, con 1.100 millones de libras en ventas en verano.
En los últimos 10 años, las ventas se han elevado un 132% tan solo en el Reino Unido. Mientras que las frutas comunes se han mantenido estables, los frutos rojos han duplicado su volumen y su valor en el mencionado periodo en Europa.
De 2004 a 2015, la cifra se elevó de alrededor de 620 millones de euros a aproximadamente 1.300 millones de euros. Los incrementos fueron especialmente marcados en 2011 y 2015, con un aumento de más del 18% en valor.
Las previsiones para los próximos 4 años son todavía más optimistas y se pronostica un crecimiento estable, que será el doble de rápido en el próximo quinquenio. Las frambuesas y los arándanos son los más demandados, mientras que el consumo y la venta de fresas se prevé que se mantenga bastante estable.
Las fresas siguen siendo las "berries" más consumidas, al representar un 75% del total de consumo de frutos rojos.
España, Francia e Italia consumen volúmenes relativamente bajos de "berries". Incluso en el tipo de fruto rojo, los gustos difieren de un país europeo a otro.