La temporada de fruta de pepita en Suecia se registra como "dramática". La cosecha ha sido dañada por las heladas en primavera. Los supermercados prestan más espacio para los productos de segunda clase, pero el comercio no siempre está satisfecho con eso. En los últimos años, se han realizado inversiones para mejorar la presentación de la fruta de pepita. ¿Ha sido en vano? Niclas Johansson de Elsanta habla sobre la inversión en una clasificadora óptica y la decepcionante cosecha de este año.
Niclas Johansson de Elsanta.
Como sugiere el nombre Elsanta, las fresas han sido originalmente el grupo de productos más importante dentro del surtido de la compañía. Para disminuir los riesgos, el surtido se amplió con otros productos, incluida la fruta de pepita sueca. Comenzó con una estación de envasado en el sureste de Suecia, situada justo entre los principales productores de fruta. Cuando una plantación se puso a la venta, Elsanta la compró, y adquirió otra finca seguidamente. La próxima temporada, el área total consistirá en 115 hectáreas, con un rendimiento de cuatro millones de kilos. "Principalmente tenemos las variedades antiguas. Gracias a la nueva siembra, queremos aumentar la producción a cinco millones de kilos", explica Niclas. "El objetivo es cosechar más de seis millones de kilos de manzanas y peras".
Más atención a la presentación
"No cultivamos las mismas variedades que las manzanas importadas. Tendríamos el mismo producto, y entonces no podríamos competir". AroMa, Cox Orange, Ingrid Marie, Alice Discovery son algunas variedades cultivadas en Suecia. Para el cultivo de la pera sueca apenas hay espacio. Bélgica y los Países Bajos están bien establecidos con la variedad Conferencia en Escandinavia. "Pero somos uno de los mayores productores con variedades como Clara Frijs, H.Elsa y A. Lukas".
Las manzanas se venden todas en el mercado local. En 2013, Elsanta invirtió en una máquina de clasificación óptica de Francia, que elevó el sector a un nivel superior. "Con una presentación más atractiva de las manzanas suecas, también logramos mejorar los niveles de los precios. Las manzanas suecas tienen valor para los supermercados suecos, pero gracias a la máquina de clasificación pudimos agregarle más". Las manzanas de primera clase se entregan en cajas de una sola capa. "Con las pegatinas adhesivas de PLU, también podemos envasar sacos de 1 a 2 kg directamente desde la línea de clasificación, y la fruta con menos color se vende suelta en cajas de plástico".
Segunda clase en supermercados
Aunque Elsanta tiene su propio almacenamiento, la compañía intenta comercializar las manzanas durante la temporada. La temporada ha sido muy decepcionante. "Suministramos más manzanas de segunda clase a los supermercados este año", dice Niclas. Las grandes cadenas han reducido los requisitos para la fruta con el fin de garantizar un volumen suficiente. "Todavía estamos cosechando, pero los pronósticos para este año de la fruta sueca son, aproximadamente un 30% menos de producción y del 70% restante, más o menos la mitad tiene daños por la helada y se venderán como segunda clase".
En el almacén, rápidamente se hace evidente que Elsanta no solo comercializa frutas de pepita y frutos rojos. Los higos turcos, las granadas y los pimientos especiales se apilan sobre palés. Durante la temporada, las cerezas también se importan de Turquía. "Tenemos que especializarnos, así que también hemos comenzado con productos turcos. Es difícil importar desde Turquía, pero podemos comprar grandes volúmenes". El año pasado, la empresa comercializó 14 camiones con higos, y para esta temporada, Elsanta ha reservado casi 700 toneladas de granadas.
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