Atherton Tablelands, región productora de aguacate en Australia, hogar de más de 90 productores, ha pasado de ser una industria de 29 millones de dólares en 2011 a más de 80 millones en 2015.
Los agricultores locales están produciendo alrededor de 13.000 toneladas de fruta por año para mantenerse al día con la demanda.
A su vez, ha habido plantaciones masivas de árboles en el Norte Tropical y en otras regiones productoras de aguacates en Australia.
Sin embargo, este aumento en las plantaciones ha provocado una escasez nacional en el suministro de plántulas de aguacate listas para la siembra, lo que ha provocado un retraso en los pedidos de plantas hasta 2020. Esta escasez se ha atribuido a la lentitud del cambio en los últimos 40 años, pues la industria toma esquejes de árboles de alta calidad y los planta.
Ahora que los australianos consumen un promedio de 3,1 kilogramos de aguacates al año, y no parece que esa cifra vaya a disminuir, la industria necesita un desarrollo rápido para superar este cuello de botella en la cadena de suministro.
Ahí es donde entran en juego los investigadores de la Universidad de Queensland (UQ). En un anuncio reciente, UQ dio a conocer un nuevo sistema de cultivo de tejidos de células madre, que podría aumentar drásticamente la cantidad de plantas de aguacate disponibles para la industria.
Según la UQ: "La tecnología no está modificada genéticamente y es respetuosa con el medio ambiente, ya que requiere menos tierra, agua, fertilizantes y pesticidas. El nuevo método de multiplicación de células madre podría duplicar la producción de aguacate en Queensland, así como también reducir el tiempo que tardan las variedades nuevas en llegar a las fincas comerciales, de 10 años a tres años o menos".
Esto podría ayudar a garantizar que los precios permanezcan bajos y que la oferta sea estable.