A finales de la semana pasada, los invernaderos lograban ender tomates a precios de entre 15 y 18 UAH/kg (0,48-0,57 EUR/kg), mientras que una semana antes los precios de este producto partían de 25 UAH/kg (0,80 EUR/kg).
Los productores explican que este pronunciado descenso de los precios es resultado de la abundancia de oferta en el mercado. Al mismo tiempo, una parte significativa de estos volúmenes consiste en productos subestándares. Además, también se están vendiendo tomates de invernaderos de plástico, a 8 UAH/kg (0,26 EUR/kg), y la situación no hace más que agravarse por el inicio de las importaciones de tomate de Turquía, pese a que la oferta del producto de importación es bastante limitada por ahora.
Al mismo tiempo, la demanda de tomates en el mercado ucraniano es baja y ello, como es natural, tiene un efecto sobre los precios. El principal canal de ventas son las cadenas de distribución locales. Por otro lado, los exportadores están poco interesados en comprar.
No obstante, hay que destacar que, pese a las marcadas reducciones, los precios del tomate en Ucrania son, de media un 21% más elevados que en los primeros días de noviembre de 2016. En cualquier caso, los jugadores del mercado opinan que la tendencia negativa de precios en este segmento continuará, dada la abundancia de la oferta.