Indicó que es vital trabajar en la búsqueda de nuevas alternativas de mercado, así como conocer y consolidar nuevos paladares para elevar la expansión de esta fruta tanto en producción como comercialización.
Precisó que Brasil es un importante productor de maracuyá, pero consume todo y por eso no exporta. “Ahí tenemos nosotros una oportunidad de abastecer a su público”, observó.
Sostuvo que debemos mirar alrededor de todo el mundo y que Asia, por ejemplo, también podría ser otro gran destino a captar. “Se pueden hacer ‘mixes’ de maracuyá con otras frutas dulces y venderlas a los mercados asiáticos”.
Buscando posicionamiento
El también gerente comercial de Selva Industrial agregó que los productores peruanos deben trabajar por diferenciarse de los países competidores de la región y buscar un rasgo propio para destacar su maracuyá.
Destacó que si bien Ecuador se consolida por su calidad en el mercado de frutas tropicales debido al clima cálido que poseen sus tierras, Perú también cuenta con cierto clima tropical, y las tierras de la costa norte peruana y la selva pueden darnos un maracuyá adecuado que podemos promocionar al exterior.
En ese sentido, remarcó que las principales empresas del rubro conformaron una mesa de trabajo en la que impulsarán el aspecto genético que está relacionado con la limpieza y multiplicación de la semilla certificada e informar al agricultor cómo cultivar mejor la fruta.