Pese a todo, la D. O. Melocotón de Calanda estima unas pérdidas de entre un 15% y un 20%, una cifra que, según su presidente, Samuel Sancho, "entra en los márgenes habituales de cualquier año". Un dato similar manejan en la Cooperativa San Miguel (Cofruval), donde un día después aseguraron estar "contentos" en el sentido de que el granizo afectó en menor medida de lo inicialmente previsto. "Parecía que iba a arrasar, pero ha quedado en menos, en un incidente que estimamos que ha dejado unos daños de entre el 15% y 30%", añadió su presidente, Arsenio Rújula. Esto, apuntó, se debe a que el granizo descargó "de forma desigual".
A menos de 10 kilómetros, en Valmuel, las pérdidas serán más cuantiosas para muchos particulares. "Prácticamente está toda la fruta en el suelo y la que no, apedreada", afirmó el alcalde de la localidad, Roberto Lahoz, que aseguró que "hay varios propietarios especialmente afectados". En Castelserás, otro de los municipios afectados por las tormentas, los vecinos hacen sus valoraciones en coches, viviendas y zonas de campo. En este caso, desde el Ayuntamiento solicitarán a la Diputación Provincial de Teruel el arreglo de dos caminos. "Están impracticables incluso con tractor", dijo el alcalde, Javier García.