Los inversores en invernaderos se ven atraídos a Grecia:
"Grecia: "Esperamos que se construyan 50 has. de nuevos invernaderos en los próximos años"
Katsanos cuenta con muchos años de experiencia en la industria hortícola griega. Fundó el grupo DKG hace más de 18 años con otros dos agrónomos griegos. Ahora, la empresa abarca otras varias empresas, incluida una sección de consultoría, un suministrador para productores de invernadero, una filial que comercializa paredes hidropónicas verticales y un centro de investigación dedicado a la sostenibilidad. Esa experiencia y esos amplios lazos con la industria hortícola le otorgan un punto de vista privilegiado desde el que determinar en qué dirección va la industria, y Katsanos cree que va hacia arriba.
“Espero que se construyan 50 nuevas hectáreas de invernaderos en Grecia en los próximos años", dice Katsanos. Algo que explica en gran medida por qué se muestra tan optimista con las perspectivas de la industria, tiene que ver con el alto consumo per cápita de hortalizas de invernadero en el país. Debido a que el ciudadano griego medio consume 65 kilogramos de hortalizas de invernadero al año, la idea era competir con las importaciones basándose en que la producción local no tendría que hacer frente a los costes de importación y transporte. Además, el país recibe más de 16 millones de turistas cada año que también consumen una impresionante cantidad de sus ensaladas griegas.
Durante mucho tiempo, la mayor parte de la necesidad de hortalizas de invernadero del país fue satisfecha por las importaciones desde Europa Occidental y el producto nacional de los invernaderos de polietileno situados en la isla de Creta. No obstante, como ocurre en muchas islas, la escasez de tierra, además de la elevada demanda del sector turístico, dispararon el precio de la tierra. La región septentrional del país ofrecía tierra más barata, pero más importante aún era que ofrecía la oportunidad de costes energéticos más reducidos (gas natural, energía geotérmica, biomasa).
“El Gobierno griego mantenía un antiguo contrato para importar gas natural a través de un conducto desde Rusia", explica Katsanos. "Esto dio lugar a precios atractivos del gas, también para los productores de invernadero, y la proximidad del gas natural de Rusia inicialmente incrementó el desarrollo en el norte". En el norte de Grecia, el clima es diferente que en Creta, y los inversores comenzaron a construir invernaderos de última generación del tipo Venlo, incluidos sistemas de enfriamiento de paneles y ventiladores. A lo largo de los años, se construyeron en Grecia invernaderos modernos e incluso un invernadero fotovoltaico no hace mucho. Los bajos precios del gas fueron motivo también para que los productores comenzaran a usar instalaciones de producción combinada de calor y electricidad (PCCE). "Igual que ocurre en los Países Bajos, primero se ocupan de vender la electricidad a las eléctricas, y la producción queda en segundo lugar", bromea Katsanos.
Debido a que recientemente en Gobierno ha realizado algunos cambios en el mercado del gas natural, los productores están buscando otros modos sostenibles y económicos para calentar sus invernaderos. "En el norte de Grecia, la energía geotérmica es sostenible y gratuita, por lo que es una buena opción", explica Katsanos. Según cuenta, el surgimiento de la energía geotérmica como opción energética viable ha estimulado todavía más el crecimiento.
“La energía geotérmica es económica y hay mucha tierra sin cultivar que cuesta poco dinero desarrollar en la región norte", señala Katsanos. "Creo que invertirá más gente en la industria de invernaderos porque es una muy buena oportunidad en estos momentos. No estoy seguro de si esto nos ayudará a recuperarnos de la situación económica, pero seguro que genera nuevos puestos de trabajo en nuestro país".
Más información:
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Christos D. Katsanos (correo electrónico)
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551 34 , Thessaloniki
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