Entre los días 22 y 24 de este pasado mes de diciembre, se activó la alerta amarilla en Canarias por fuertes vientos, oleaje y calima.
Según los partes registrados hasta el momento, los vientos dejaron pérdidas en 1.752 hectáreas de cultivo de plátano de Canarias, en la mayoría de los municipios donde se cultiva, aunque todo indica que en general se trata de pérdidas de escasa intensidad, salvo en las zonas más expuestas a los vientos.
Las pérdidas registradas han alcanzado aproximadamente 3.890.000 kilogramos de plátanos de Canarias. El 60% de las fincas afectadas ha sufrido daños que podrían alcanzar una media de entre el 8 y el 10%.
En cuanto a la distribución por islas, las zonas más afectadas han sido Tenerife, con pérdidas de 1.940.000 kilos en el sur y 530.000 kilos en el norte, el Suroeste de La Gomera, con pérdidas de 120.000 kilos, y Oeste y Sur de La Palma, con 1.300.000 kilos de pérdidas, donde se reportan daños también en invernaderos y cortavientos, así como de planta tumbada.
El resto de las zonas afectadas han registrado daños leves con afección de las hojas y sin apenas plantas caídas.
Hasta el momento se han reportado daños en alrededor de 5.000 parcelas. Los daños en invernaderos están siendo visitados por los técnicos en estos primeros días del año y se prevé el comienzo de las peritaciones de los daños en planta a partir de la próxima semana.