Como colofón del Foro de la Zanahoria de este año, Henning y Anja Holste abrieron las puertas de su tienda en Martfeld. Los participantes del foro quedaron impresionados por la abundante oferta de hortalizas frescas y productos procesados. La comercialización directa de patatas, fresas y espárragos comenzó en la década de 1980, inicialmente desde el garaje. "Hemos crecido poco a poco, pero sin pausa", declaró Henning Holste.
En 2012, la pequeña sala de ventas se convirtió en una tienda agrícola que vendía no solo sus propios productos sino también productos regionales de los alrededores. A medida que el surtido crecía y las tartas y pasteles caseros tenían cada vez más demanda, los Holste decidieron instalar una pequeña cafetería. Alentados por el éxito, con el tiempo incluso contrataron un chef de repostería. En 2017, el salón de esta casa típica de Baja Sajonia fue reconstruido con compromiso y contribución propia. Ahora en las estanterías forradas de azulejos por ellos mismos, y en las mesas de roble de la propia finca se encuentran no solo sus productos propios, sino también mermeladas, licores y sopas.
Imagen: Tim Jacobsen
Los extremos meteorológicos en el cultivo de zanahoria
Los participantes del foro también se pudieron hacer una idea de la producción en el campo. Henning Holste hace muchas cosas de manera diferente a otros agricultores. Cultiva sus 15 hectáreas de zanahorias en caballones especiales, de 100 cm de ancho en la base y 80 cm en la cresta, separados por 166 cm entre sí. "De esa manera caben entre las ruedas del tractor", explica Holste. Las zanahorias se siembran en doble hilera. Entre las filas de zanahorias se coloca una manguera de goteo. "Nuestros suelos ligeros no pueden prescindir de la aspersión", dice Holste.
Y ciertamente no en un año extremadamente seco como el 2018. Sin embargo, las mangueras de goteo solo duran un año. "Nuestra agua es rica en hierro, por lo que las mangueras se obstruyen con el tiempo".
Imagen: Tim Jacobsen
Aislamiento para optimizar la producción
A Holste se le ocurrió la idea de los caballones del cultivo de espárragos. Así, el suelo se calienta más rápido y las primeras patatas ya se pueden cosechar a finales de abril.
Holste planta los tubérculos pregerminados a mano, incluso las variedades tardías. Esto no lleva más tiempo que con una máquina, según ha comprobado Holste: "Seguí a los plantadores con un tractor. Ellos iban a 1,2 km/h en el campo. Dos trabajadores pueden poner una hectárea de patatas en los hoyos previamente perforados en un día. "El proceso no es más caro que la siembra a máquina", dice Holste.
Por otro lado, cuando recoge las zanahorias, se basa totalmente en la tecnología. Hace dos años compró una cosechadora de zanahorias especial de un fabricante belga, que fue diseñada de acuerdo con sus necesidades. Llama la atención la gran plataforma de trabajo en la parte trasera. Tan pronto como las zanahorias han dejado la banda de sujeción, se lavan. Para esto hay un suministro de agua de 1.500 l en la parte delantera de la máquina. Luego se atan y empaquetan en cajas que se cargan inmediatamente en carros, de ahí la gran plataforma. Una vez que se han llenado los carros, la cosechadora regresa al patio con las mercancías listas para la venta.
Imagen: Tim Jacobsen
Ventajas comerciales
Desde la perspectiva de Henning Holste, el procedimiento tiene grandes ventajas económicas, ya que ahorra mano de obra. "Preferiría que el tractor condujera solo y solo hubiera que girarlo". Holste enfatiza que los trabajadores están mejor protegidos del clima por la cubierta de lona. Al fin y al cabo, las últimas zanahorias se recogen justo antes de Navidad.
Autor: Thomas Gaul
Más información:
Hof Holste
Ortende 5
27327 Martfeld
Deutschland
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