Mersin es uno de los principales centros de producción agrícola de Turquía. En el distrito de Silifke, los agricultores intentaron producir fresas sin suelo hace diez años. El primer intento fue en una pequeña finca de 0,1 hectáreas. Ahora la superficie de producción se ha incrementado y ha alcanzado un total de 50 hectáreas.
Mehmet Yilmaz Yaltir, presidente de la Asociación de Productores de Fresas, dice que la nueva técnica es más rentable para los agricultores en comparación con la producción tradicional.
Yaltir afirma que con esta técnica pretenden producir durante todo el año. "Como podemos producir durante todas las temporadas, tenemos más producción. A medida que nuestra calidad aumenta, logramos ampliar nuestros mercados. En este momento tenemos la oportunidad de vender más fresas en Turquía y en ultramar", comenta Yaltir.
Enfatiza que las fresas de campo abierto sólo pueden producirse en abril, mayo y junio, y que con la nueva técnica sin suelo pueden prolongar la temporada hasta 8 meses. Por lo tanto, los agricultores han adoptado la nueva técnica para producir fresas sin suelo, según Yaltir.
"En 2009, intentamos producir fresas sin suelo sólo en una superficie de 0,1 hectáreas. Hoy en día, esa superficie ha aumentado a 50 hectáreas. En campos abiertos sólo se pueden cosechar de 4 a 5 toneladas de fresas por 0,1 hectáreas, mientras que con esta técnica podemos cosechar de 10 a 15 toneladas de fresas por 0,1 hectáreas. Construimos este sistema porque queríamos evitar las enfermedades relacionadas con el suelo y las malas condiciones climáticas. Además, ahora conseguimos una mayor productividad".
Ali Turer, de la Asociación de Mayoristas de Atayurt, dice que compran fresas por 11 liras (1,85 €) por kilogramo directamente a los productores, y que en su distrito esperan de 70 a 80 toneladas de fresas producidas en una finca de 8 hectáreas.
Fuente: AA (Huseyin Haskan)