Los cambios ecológicos se nos echan encima por el cambio climático, según muchos expertos. Nuestro suministro de alimentos, tan dependiente de una cantidad tan reducida de factores –como la temperatura, la lluvia y los cambios en los ecosistemas– también se ve amenazado.
Un gran reto para el cultivo de banana con el aumento de las temperaturas es la propagación de plagas y enfermedades. Los expertos agrícolas advierten de que el tipo de bananas más común podría extinguirse debido a una letal enfermedad tropical que está barriendo los cultivos de todo el mundo. El mal de Panamá se originó en los años 50. Es un hongo que ataca a las raíces de las plantas. No se puede controlar químicamente y hay una cepa en particular que se considera una amenaza para las bananas Cavendish que crecen por todo el mundo. Por ahora, la única manera de contener la enfermedad es poner en cuarentena grandes parcelas de tierras de cultivo, pero ya se ha extendido a África, Asia, Australia, Oriente Medio y Centroamérica. Los expertos temen que si el mal de Panamá alcanza Sudamérica, la banana Cavendish está condenada.
Según upr.org, una manera de salvar las bananas podría ser un bananero de Madagascar. Se trata de una especie silvestre inmune al mal de Panamá, pero también es comestible, y los investigadores están tratando de crear un híbrido de las dos especies para producir una variedad resistente a la infección. El problema es que solo existen cinco de estos bananeros maduros.
