Una empresa de semillas estima que hay mil hectáreas de cebollas más que el año pasado en el centro-norte de Italia. "Las altas cotizaciones de los últimos meses les están están creando expectativas muy altas a los productores, que también esperan alcanzar precios altos en la próxima campaña. Nosotros hemos deducido un aumento de mil hectáreas considerando las semillas que hemos vendido, por lo que esperamos que todo salga bien".
Sin embargo, para que las cosas salgan bien, todo debe desarrollarse tal y como ha sucedido este año, es decir, que haya poca producción proveniente del norte de Europa. De lo contrario, corremos el riesgo de obtener los mismos precios que en 2017, con un promedio de 8 céntimos de euro por kg.
"La demanda de cebollas doradas ha sido muy animada, tal vez porque son las que mejor se vendieron este año, reportando más beneficios, y también porque tienen mucha demanda en el extranjero. Pero será el mercado quien decida si aumentar las áreas de cultivo ha sido una idea inteligente".
Por otra parte, los productores no tienen muchas alternativas: la inversión inicial para el cultivo de cebollas no es muy alta (alrededor de 2.000 €/ha o incluso menos) y, a menos que se cometan grandes errores, los rendimientos son siempre satisfactorios.