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Rob Morren, Gerente del Sector Alimentario de ABN Amro:

"Los distribuidores que no sepan adaptarse a los criterios de compra del retail tendrán problemas"

El poder de compra de los supermercados es cada vez mayor, lo que no facilita el papel de las empresas comercializadoras de frutas y hortalizas. Sin embargo, Rob Morren, gerente del Sector Alimentario del banco neerlandés ABN Amro, ve que se presta cada vez más atención al análisis del coste social de la producción, llamado True Cost Pricing (el precio de coste real). Seguidamente se puede leer una entrevista con él, donde se tratan temas tan diversos como el brexit, el blockchain, la conveniencia, las ventas online de frutas y hortalizas y la robotización.


Rob Morren

"Sobre todo las grandes empresas comercializadoras de frutas y hortalizas están evaluando los riesgos en torno al brexit", dice Rob. "Hicimos un análisis de impacto para nuestros clientes que realizan elevadas exportaciones al Reino Unido. Siguen siendo particularmente altas las preocupaciones en cuanto a la logística. Si un camión se retrasa unos días, la calidad de los productos se verá afectada. Por otro lado, el Reino Unido tiene un nivel de autosuficiencia con respecto a las frutas y hortalizas inferior al 40%. Este nivel significa que seguirá siendo un importador neto. Sea cual sea el escenario que se adopte, se mantendrá la necesidad de productos de calidad holandeses".

"Si hay un brexit duro, serán los consumidores británicos los que pagarán la factura. Sin embargo, el sector hortofrutícola tiene una ventaja: los productos son relativamente insensibles a los ciclos económicos. El principal problema es la gran incertidumbre que rodea a este asunto. Hace dos años, pensamos que tendríamos una respuesta definitiva un año antes de la fecha de la salida del Reino Unido. Ahora, tenemos que seguir esperando el resultado de la próxima votación crucial y dos semanas antes de la fecha límite, aún no sabemos nada. Enviar grandes cantidades de productos al Reino Unido a última hora tampoco es tan fácil: hay una gran escasez de espacio de almacenamiento refrigerado en ese país".

Evitando la discusión de los precios

Mientras tanto, los retailers son cada vez más grandes, lo que genera una presión sobre las compañías comerciales del sector hortofrutícola. "Los grandes retailers están obteniendo aún más poder de compra, ejerciendo presión sobre el resto de la cadena. Además también se puede ver que hay cada vez más compras directas a los productores. El desafío para los distribuidores es saber adaptarse a los criterios de compra de los grandes retailers . De esta manera, pueden, en parte, evitar las discusiones sobre los precios, mediante colaboración y agregando valor real. El enfoque debe estar en category management, en la conveniencia, en el desarrollo de productos o en ser impecable en cuanto a la sostenibilidad", explica Morren.

"Aquí en los Países Bajos, nos encontramos con la realidad de la alta presión promocional. Esta presión es cada vez mayor y correspondería más a un clima económico menos favorable. Sin embargo, los consumidores esperan ver sus productos favoritos en promoción; se les ha enseñado que algo siempre puede ser más barato. La ventaja de estas promociones es que pueden provocar un mayor consumo. Sin embargo, también puede provocar una presión mucho mayor sobre los márgenes en la cadena y por lo tanto, las promociones se realizan parcialmente a expensas de los presupuestos de innovación y sostenibilidad", dice el gerente del Sector Alimentario.

"Debido a que se realizan cada vez más compras directas a los productores, la función logística de los distribuidores se vuelve aún más importante. Por otra parte, la importancia de la función comercial siempre se mantendrá, porque hoy en día los consumidores exigen un suministro durante todo el año por lo que la actividad de los distribuidores consiste en la búsqueda constante de productos de la misma calidad. Pero los distribuidores que no sepan adaptarse a los criterios de compra de los retailers y que no se centren en el desarrollo de nuevos mercados, lo tendrán difícil. La población europea está en un periodo de estancamiento y envejecimiento; la cantidad de bocas que se tienen que alimentar y el volumen requerido de alimentos se está estancando, lo que significa que hay que llevar los productos a los mercados en crecimiento, que hay que agregar más valor en mercados existentes o exportar tecnología, conocimiento y habilidades".

Guerra de sostenibilidad

"Actualmente, en los Países Bajos y en Europa, se habla mucho sobre un logotipo en los productos que dan información sobre los aspectos nutricionales, medioambientales y sociales. Estos logotipos se pueden encontrar en la parte frontal de los paquetes de productos, y ya se pueden ver en países como Francia y Bélgica. Creo que el sector de las frutas y hortalizas, que puntúa muy bien con sus productos sanos, puede beneficiarse de este sistema. Con mediciones objetivas de lo que es saludable, el sector hortofrutícola puede transmitir su mensaje saludable aún mejor, y el supermercado también se puede beneficiar de este sistema, ya que el departamento de frutas y hortalizas aporta, después de todo, importantes márgenes de beneficio. Esto podría llevar a una batalla de sostenibilidad. Nos conviene a todos, ya que nadie puede estar en contra de producir de una manera más respetuosa con el medio ambiente. Sin embargo, es importante que la factura se distribuya de manera justa entre todas las partes de la cadena", enfatiza Rob.

"Al mismo tiempo, hay un enfoque cada vez mayor en el concepto de True Cost Pricing, los precios de coste real. Hace diez años, el Foro Económico Mundial preguntó a los grandes empresarios cuáles eran sus principales preocupaciones. Todos estuvieron de acuerdo en que era el sistema financiero. Desde entonces, los riesgos relacionados con el clima se han convertido en la mayor preocupación. Esta es la razón por la cual el sector hortofrutícola debería tomar la iniciativa en el área de sostenibilidad, mediante medidas concretas como proporcionar transparencia acerca de la huella de CO2 de sus productos. Como se dice popularmente: footprint is the new currency (la huella es la nueva moneda). Son medidas concretas a las que la gerencia de una empresa puede prestar atención de inmediato; de hecho, los líderes en el sector ya están haciendo gestiones en este campo".

Rob piensa que las ventas online de frutas y hortalizas también pueden proporcionar un impulso para los distribuidores. "Todos los retailers están invirtiendo en ventas online. Y no siempre para obtener un beneficio directo, pero saben que los clientes que les compran online son también leales a sus tiendas físicas. Este canal también ofrece oportunidades fuera de los supermercados. Hablamos por ejemplo de iniciativas como Stockton. Podrían ser socios muy interesantes para los distribuidores para comenzar una plataforma conjunta. La robotización es otra tendencia que se está volviendo cada vez más común entre, por ejemplo, los procesadores de hortalizas. La robotización tiene numerosas ventajas para estas empresas ya que pueden prevenir pérdidas de corte y, por lo tanto, reducir los desperdicios. La robotización puede garantizar mejor la calidad y dar una solución al problema laboral. ¿Quién, hoy en día, quiere estar en una sala de corte a 4 grados centígrados? Los robots ciertamente proporcionarán parte de la solución", espera Rob.

También prevé que los sistemas como el blockchain se volverán más comunes en el sector hortofrutícola. "Pero blockchain no es un fin en sí mismo, sino un medio para organizar la cadena de datos de manera más eficiente y segura. Ya se están intercambiando grandes cantidades de datos en la cadena de frutas y hortalizas, por ejemplo sobre la calidad o la seguridad. El uso de blockchain puede conducir a, por ejemplo, que los contratos o pedidos se procesen más rápido. En el caso de una retirada de productos, puede garantizar que todas las partes tengan conocimiento inmediato de toda la información disponible. Junto con la llamada Internet de las Cosas y la Inteligencia Artificial, provocará una aceleración en varios sectores, pero aún queda mucho por hacer antes de que esto se convierta en algo común y corriente!"

Para más información:
Rob Morren
ABN Amro (Países Bajos)
rob.morren@nl.abnamro.com 

Fecha de publicación: