Para algunos pequeños productores el reto es la calidad y el respeto del medio ambiente. Efectivamente, la obtención de beneficios es estable al no estar supeditados a fluctuaciones de mercados. Pequeños volúmenes hortícolas se traducen en estabilidad de precios. "No solo obtenemos beneficios, sino productos de excelente calidad y reconocimiento. Solo nuestros excedentes se destinan a mayoristas", explica Joan Ribosa.
Verduras Ribosa, con una explotación de 6 hectáreas en un entorno privilegiado en Cabrera de Mar (Barcelona) , tiene una gama diversificada de productos de huerta: lechuga, patata, guisante, coliflor, perejil, alcachofa, escarola, judía con DOP, tomates (pera y rama) y la estrella local cada vez más apreciada en la gastronomía, los calçots. Esta cebolla alargada, tierna, poco bulbosa y de sabor único, es una especialidad regional tradicional en auge, incluso fuera de sus fronteras. La temporada comienza a mediados de octubre y finaliza a mediados de abril.
Sin ser una estrella Michelin, Joan Ribosa sigue el nuevo concepto de grandes restaurantes: una huerta destinada a la gastronomía. “Empezamos a utilizar nuestros productos de huerta en el restaurante familiar y ahora otros restaurantes quieren que produzcamos para sus cocinas. Algunos productos son biológicos aunque carezcan de certificación", especifica Joan. Los otros canales de venta son mercados locales donde los precios son más altos que a través de mayoristas y con una clientela fiel.
Verduras Ribosa es miembro de asociaciones de Defensa Vegetal que les proporcionan conocimientos valiosos e inspección de los cultivos. Así, consiguen un equilibrio entre flora y fauna, el seguimiento de parásitos y los tratamientos adaptados para evitar plagas, hongos y dar con los insectos predadores de enfermedades, entre otros.
La diversidad de productos hortícolas y la pequeña superficie permiten que las cosechas estén controladas por un riego preciso, erradicación de enfermedades y pérdidas mínimas. "Este año solo los calçots serán de menor calibre, pero con su sabor exquisito y los nutrientes intactos".
“Trabajar a pequeña escala es muy satisfactorio: no conocemos la palabra 'competencia'. La fluctuación de precios es mínima y el contacto directo con el cliente, una recompensa”, comenta Joan Ribosa.
Más información:
Joan Ribosa Mercader
Verduras Ribosa
08349 Cabrera de Mar
+34 937 590 593
calsfrares.ribosa@gmail.com
www.calsfrares.com/verduras-ribosa/