En términos de producción de fresas, Polonia se sitúa en segundo puesto en Europa y en octavo en el mundo, informa el Ministerio de Agricultura. En 2018, el país produjo aproximadamente 196.000 toneladas de esta fruta, un 10 por ciento más que un año antes. Una de cada dos fresas se exporta a mercados extranjeros.
La mayoría de las fresas polacas se envía al mercado de la UE. El año pasado, Polonia exportó fresas por valor de cerca de 180 millones de euros, la inmensa mayoría (98.500 toneladas valoradas en 170 millones de euros) congeladas. Los principales receptores de las fresas congeladas fueron Alemania (38%), Países Bajos (12%), Francia (11%), Bélgica (6.5%), Dinamarca (4,7%), Suecia (4,5%) y el Reino Unido (4,4%).
En cuanto a las fresas frescas, se envió un total de 5.900 toneladas valoradas en 8,8 millones de euros. Los principales destinos de estas frutas fueron los Países Bajos (23%), Bielorrusia (15%), Lituania (11%), Alemania (10%) y Bélgica (7,5%). Fuera de la Unión Europea, aparte de Bielorrusia, la mayoría de estas frutas acabaron en Noruega (6,6%).
Cada vez son más las fresas que acaban en el mercado local, por lo que sus precios están en caída. El 28 de mayo de este año, las fresas de mesa nacionales costaban entre 7 y 10 eslotis por kilo (1,64-2,35 euros) en el mercado mayorista de Poznan, y en Bronisze el precio osciló entre 4 y 7 eslotis (0,94-1,64 euros).
En 2018, Polonia importó 13.500 toneladas de fresas frescas. En comparación con 2017, las importaciones cayeron más de un 11%. El valor de las importaciones se situó en 27,4 millones de euros y cayó un 2,6% en comparación con 2017. Los principales proveedores de fresas frescas fueron España (66%), Grecia (11%) y Alemania (9,5%), y los mayores fuera de la UE fueron Serbia, Egipto y Marruecos.
El Ministerio de Agricultura explica que en el caso de las fresas congeladas las importaciones casi duplicaron a las de fresas frescas. En Polonia entraron 21.100 toneladas (aproximadamente 29 millones de euros). Más del 43% de ese volumen (9.100 toneladas) procedía de los países de la UE. Los principales proveedores el año pasado fueron Egipto (27%), Alemania (20%), China (12%), Ucrania (11%), Países Bajos (8,3%) y la República Checa (6,3%).
Fuente: portalspozywczy.pl