Christophe Ochs, Laurent Martinet y Olivier Dutertre no han esperado a la efervescencia de las etiquetas responsables con el medio ambiente para situar la ecología en el corazón de sus huertos. A pesar de que los tres socios comercializarán la cosecha de 2019 bajo el certificado HVE (Alto Valor Medioambiental) de nivel 3, esta etiqueta no representa nada más que una etapa en su estrategia a largo plazo, que tiene como objetivo combinar armónicamente la biodiversidad y la rentabilidad.
Sobre Brun-Production y Brun-Conditionnement
"En 2011, tras la retirada de uno de nuestros proveedores, nos hicimos con 150 hectáreas de huertos para mantener la producción y convertirnos en productores. De esta forma nacieron Brun-conditionnement y Brun-production, filiales de Albafruit, oficina de ventas situada en Moissac (Tarn y Garona). Hoy en día, producimos manzanas y kiwis en 150 hectáreas repartidas en cuatro puntos, que nosotros mismos almacenamos y envasamos aquí. Diez de ellas son ecológicas para las manzanas, y cuatro de las hectáreas para el kiwi están en proceso de conversión", explica Christophe.
Huerto de Pink Lady
Huerto de replantación a los 3 años, de manzanas Envy
Una biodiversidad "mimada"
Olivier es quien se encarga de la gestión de la producción, quien frecuenta los huertos desde hace unos veinte años. En el centro de esta zona boscosa, que rebosa de fauna salvaje, todo se centra en generar una explotación sostenible.
Con el fin de regular de forma natural los problemas ligados a la invasión de plagas de insectos, los huertos están equipados con dispositivos de confusión sexual. En medio de los manzanares, se han colocado nidos de murciélagos y cajas de insectos. "Hasta pensamos en intentar introducir gallinas en los huertos, para luchar contra las plagas de insectos", añade Laurent. En cuanto a la polinización, está asegurada por las abejas europeas, criadas por un apicultor, pero también por las Osmia, estas famosas abejas albañiles que se refugian en las cajas depositadas en las parcelas.
Caja para las abejas Osmia
La replantación de los setos, que Olivier comenzó hace unos quince años, también juega un papel importante en la preservación de esta rica biodiversidad: "En la actualidad, cada vez tratamos más el tema de la replantación de los setos para permitir alojar una fauna auxiliar. Pero esto no es algo que se nos haya ocurrido de la noche a la mañana. Aunque nuestros padres y abuelos arrancaron los setos, hace más de 15 años que nosotros los hemos replantado. Esto permite realizar enlaces entre las superficies que son boscosas y las que no lo son", explica Olivier.
Seto maduro plantado en el interior de los huertos
Seto joven
La innovación y el conocimiento al servicio de una gestión sostenible
Mientras que parece que los huertos no tienen más secretos para Olivier, este apasionado de la fruticultura aborda el tema con humildad. "Lo que hace que este tema sea apasionante es que aprendemos cosas nuevas todos los días. Siempre nos encontramos con nuevos desafíos y tenemos que saber cómo innovar".
"En cuanto a lo ecológico, por ejemplo, seleccionamos variedades que son resistentes por naturaleza a la sarna del manzano, de forma que minimizamos las intervenciones químicas. Las parcelas ecológicas también nos permiten identificar las técnicas de producción más eficaces, que son respetuosas con el medio ambiente y que también son rentables, para aplicarlas lo más pronto posible a las parcelas de forma razonable".
El medio ambiente, evidentemente, ocupa un lugar privilegiado en la toma de decisiones de los tres asociados: "A nivel técnico hay un problema muy importante hoy en día, que es el tema del medio ambiente. Se acabó el tiempo en el que realizábamos tratamientos en el conjunto de la explotación porque habíamos visto tres pulgones en una parcela. No simplemente porque esto sea algo costoso, tanto en lo que respecta al insumo como a la energía, sino también porque es absurdo. Hemos instaurado en los huertos una gestión por parcelas, lo que significa que tratamos el problema en el lugar determinado y en la parcela concreta. Esto conlleva esfuerzos de observación y de conocimientos", cuenta Olivier.
Estación meteorológica
Equipamiento a la vanguardia tecnológica
Para poder llevar a cabo esta gestión por parcela con capacidad de respuesta y precisión, en cada lugar se realiza un seguimiento riguroso. Estaciones meteorológicas que registran de forma continua las temperaturas, la pluviometría, la velocidad del viento, la humedad de las hojas o incluso la presión atmosférica. En todas las parcelas hay equipamiento con mallas contra el granizo, que regulan en función de su color la tasa de iluminación solar. En lo que respecta al riego, el uso del recurso es objeto de una atención muy particular, para preservar el agua al máximo.
Lago artificial en medio de los huertos que sirve para el riego
Una estación de envasado que se amplía y se moderniza
La estación de envasado cuenta con el certificado IFS, y dispone de dos líneas de producción. Con una capacidad de 8.000 toneladas de frutas, el edificio está actualmente en fase de ampliación. Se prevé que los trabajos se finalicen a principios del año 2020. Al igual que los huertos, la nueva estación se modernizará teniendo en cuenta la dimensión ecológica: "Todo se va a automatizar. Para minimizar nuestra huella medioambiental, el calor generado por las cámaras frigoríficas se utilizará para secar las manzanas. También seremos autosuficientes desde un punto de vista energético a este nivel", cuenta Laurent.
Con un grado de experiencia elevado a nivel de agricultura e industria, con grandes competencias en materia de comercio y de gestión, los huertos, al igual que la instalación, parece que han encontrado en estos tres socios la combinación ideal para perdurar con éxito.
Laurent Martinet, Olivier Dutertre y Christophe Ochs
Para más información:
Albafruit SARL
665 Route de la Megere
82200 Moissac
Teléfono: +33 (0)5 63 04 60 04
contact@albafruit.fr
www.albafruit.fr