"Tenemos invernaderos desde 1973 y fuimos una de las primeras empresas hortícolas en Baviera que empezaron a cultivar en canales de sustrato", dice Christian Drechsler, de Gemüsebau Bernd & Christian Drechsler GbR. Con el paso del tiempo ha ido creciendo hasta alcanzar las 8,5 hectáreas actuales en las que cultivan tomates, pepinos, berenjenas y ocasionalmente pimientos.
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Actualmente, el segundo grupo de pepinos de este año crece en los invernaderos, y el tercer grupo se plantará en agosto. "De esta manera, dependiendo del tiempo y la competencia de España, podemos ofrecer pepinos de Knoblauchsland hasta mediados o finales de octubre". En el mercado se demandan mucho los pepinos de un peso de 400 gramos.
"Hace dos años construimos un invernadero nuevo para tomates, ahora disponemos de 50.000 metros cuadrados para cultivarlos". Knoblauchsland dispone en total de unas 40 hectáreas para cultivo de tomates. Hace aproximadamente unos 10 años que el cultivo de tomates pasó a realizarse en sustrato en casi todas partes: "Esto tiene un efecto positivo tanto en el rendimiento como en el ahorro de agua".
Franken dispone de berenjenas desde 2007, dice Florian Wolz, director ejecutivo de Franken-Gemüse Garlicsland eG: "La superficie en nuestra región es un poco pequeña, poco más de 3 hectáreas, pero también vemos cierto crecimiento. Especialmente la berenjena Graffiti está ganando importancia lentamente. Estas hortalizas son a veces incluso más populares en el sur de Europa que los tomates. Muchos en Alemania solo conocen las variedades oscuras, pero las más claras son mucho más firmes y versátiles".
El uso de insectos beneficiosos es muy importante para Drechsler: "Solo usamos la protección biológica de plantas con insectos beneficiosos, que también transportamos entre cultivos. Así que los insectos ya están acostumbrados a las condiciones climáticas en el invernadero y podemos combatir selectivamente las plagas. Por eso, también trabajamos con cultivos intermedios que ofrecen a los insectos beneficiosos la oportunidad de pasar de las plantas viejas a las nuevas, especialmente porque las plantas viejas son buenas para el clima en el invernadero y protegen a las plantas jóvenes. Al mismo tiempo, esto garantiza que mantengamos la brecha entre los cultivos lo más pequeña posible y que podamos abastecer a nuestros clientes casi por completo".
Las hortalizas, que se cosechan y envasan por la mañana, ya están en el almacén de Franken-Gemüse por la tarde, donde se recogen para los clientes. Drechsler nos lo explica: "Utilizamos diferentes tamaños y tipos de envases para los muchos clientes. Cambiar las máquinas cada vez es muy complicado, sería muy difícil automatizarlo".
Para mantenerse al día con el crecimiento de la empresa, en otoño van a demoler un invernadero construido en 1994 y lo van a reemplazar por una central de envasado y preparación de pedidos. Para el futuro, al productor, como a muchos, le gustaría ver precios más razonables para sus productos: "El costo del cultivo y la mano de obra aumentan, por lo que es muy importante ajustar los precios de nuestras hortalizas. Desafortunadamente, los consumidores se resisten".
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Más información sobre la empresa Franken-Gemüse Knoblauchsland eG.
Para más información:
Christian Drechsler
Gemüsebau Bernd & Christian Drechsler GbR
Almoshofer Hauptstraße 111 
90427 Núremberg
Tel: 0911 37474037
Mail: drechsler@odn.de
Web: www.drechsler-gartenbau.de
Florian Wolz 
Franken-Gemüse Knoblauchsland eG
Raiffeisenstraße 200
90427 Núremberg
Tel. 0911 93483-0
Mail: info@franken-gemuese.de
Web: https://www.franken-gemuese.de/