Según datos de por la Asociación de Exportadores (ADEX), en el primer semestre del 2019, los envíos de maracuyá se redujeron un 12,36% respecto al mismo periodo del año anterior, generando 10,2 millones de dólares.
Si bien en los últimos años los volúmenes de exportación de maracuyá peruano han ido incrementándose: en el 2016 sumaron 14.389 t; 16.221 t en el 2017 y 17.119 t en el 2018; los montos totales facturados por los envíos cayeron 14% en el 2017 y 7% en el 2018, al sumar 40.852.000 de dólares.
Tal como informa Renzo Gómez, portavoz del Grupo de Trabajo de Frutas para la Industria de ADEX, La disminución de beneficios en la comercialización de maracuyá se debe a la pérdida de dulzor de los frutos y a la baja calidad de los cultivos.
La superficie cosechada de maracuyá en el 2018 ascendió a 6.160 hectáreas, principalmente ubicadas en Lima (33% de participación), Lambayeque (18%), Áncash (18%), La Libertad (13%) y Piura (13%). Según ADEX, el 70% de la producción nacional de maracuyá está destinado a la industria.
El principal destino de exportación del maracuyá peruano, en sus diversas presentaciones, es Holanda, al que se hicieron envíos por 32.616.000 de dólares en el 2018. Los siguientes destinos de las exportaciones peruanas de maracuyá son los Estados Unidos, Chile y Puerto Rico, de acuerdo con los reportes del 2018.
Frente a la problemática que afrontan los productores de maracuyá, ADEX, con el apoyo del sector público, trabaja en mejorar formación de los agricultores y se propone desarrollar una variedad de semillas de élite que cumpla con los estándares de calidad exigidos en el exterior. Como parte de sus acciones, realizará el 2° Congreso Internacional de Maracuyá los días 5 y 6 de setiembre en Chiclayo.
Con dichas acciones, Gómez estima que la producción y los envíos de maracuyá se recuperarán en el 2021. Con este mismo objetivo, señaló, se trabaja en el ingreso a los mercados de Corea del Sur, China y Nueva Zelanda.
Fuente: gestion.pe