Extremadura cuenta con más de 5.000 hectáreas dedicadas a la producción de brócoli, según los últimos datos del Ministerio de Agricultura. Hace solo unos años, el Centro de Investigaciones Científicas y Tecnologías de Extremadura (Cicytex) inició un proyecto para conocer cómo se adapta no solo este cultivo, sino toda su familia (las brassicas) a los campos de la comunidad autónoma. Los investigadores crearon ensayos de 25 variedades de brócoli, 20 de coliflor y 15 de col (rizada, lisa, picuda y lombarda) con el objetivo de "conocer la aclimatación, los ciclos de cultivo, producciones y características de las nuevas variedades en las condiciones agroclimáticas de Extremadura", explican.
El equipo de Cicytex ha mostrado recientemente los resultados de estos ensayos sobre el terreno (en la Finca La Orden) al sector agrícola, cooperativas y a empresas de congelados y deshidratados.
Una hortaliza saludable
El estudio de los cultivos de brassicas está incluido en las tareas del proyecto Agros de Cicytex: ‘Sostenibilidad de las producciones hortícolas en los regadíos de Extremadura’. Las brassicas (brócoli, col, coliflor...) presentan una amplia diversidad y la que más se ha desarrollado en la región es el brócoli. Su cultivo ha crecido en los últimos diez años en Extremadura de manera importante, pasando de unas 1.500 hectáreas a una superficie aproximada de 5.000 hectáreas. "Es una hortaliza considerada superalimento, con características muy saludables, por lo que su demanda está aumentando", valora el Cicytex.
En Extremadura, el brócoli y otras brassicas son cultivos de otoño para su transformación industrial en congelados y deshidratados, aunque en los últimos años se ha incrementado notablemente la superficie de su cultivo en primavera, fundamentalmente, en las Vegas Altas del Guadiana.
Fuente: elperiodicoextremadura.com