La actual campaña de cítricos italiana será recordada no solo por los productores por la escasa disponibilidad de productos y, en consecuencia, por la reducción de los ingresos, sino también por los consumidores finales, que, especialmente en los últimos días, encuentran en las tiendas precios realmente imposibles para un kilo de clementinas.
"Los precios incluso se han duplicado en muy poco tiempo y es difícil encontrar todavía fruta en los árboles. La campaña 2019/20, que cerrará con más de dos meses de adelanto, se considera histórica, al igual que la anterior, que fue marcada por una producción excesiva y precios muy bajos", explica Domenico Maraglino, productor de cítricos de la provincia de Tarento.
"Para muchos, la temporada ya ha terminado. Para otros, está a punto de terminar, especialmente para aquellos que han podido retrasar la maduración de la fruta a través de intervenciones fitosanitarias. Los precios están al límite de lo imaginable: se registran picos de 1,50 €/kg en el campo, en comparación con los 0,10 €/kg del año pasado".
"La situación es ligeramente mejor para las naranjas porque no ha habido un gran consumo en los últimos meses. Pero hay que recordar que la reducción en la producción también afecta a esta referencia (alrededor del -40% para las de la provincia de Tarento). Parte del producto aún no se ha cosechado y quedan naranjas para un mes más. Si hay algo que es alentador, es la calidad de nuestra fruta. De hecho, este año no solo el precio es bueno, sino también el tamaño y el sabor, todo debido a una menor producción".