Para los productores ecológicos pequeños el futuro parece prometedor. “No podemos quejarnos, exportamos a países con un mercado estable en ecológico como Dinamarca o Alemania”, comenta Victorio Catalán, de Saltamontes Bio. “Aunque el cultivo ecológico sea más vulnerable a mermas, hemos dado con soluciones factibles”. Efectivamente, el grupo ha creado una línea de compota de calidad premium confeccionada con fruta de excelente calidad pero estéticamente no apta para la comercialización.
“El granizo es común aquí por la climatología, no se puede evitar, y provoca daños estéticos, aunque la fruta siga siendo excelente a nivel de sabor y nutrientes. Por ahora tenemos una línea de compotas de pera y manzana, pero estamos a punto de lanzar nuevos gustos con melocotón, ciruela, cereza y también de fruta con especias. El mercado alemán tiene gran interés en esta gama de productos ecológicos”, detalla Victorio.
“La cereza ecológica española es una llave que abre mercados internacionales”
“Nuestra agenda comercial es estratégica. Por ejemplo, con Francia pronto podremos suplir huecos de producción con cámaras exclusivas para ecológico ofreciendo pera hasta agosto”, comenta Victorio.
“Pero sobre todo la cereza está en auge y nos abre mercados extranjeros hasta ahora impensables. Cultivamos cerezas tardías de montaña a unos 800 metros, su piel de un rojo oscuro y la pulpa roja le dan un aspecto atractivo, así como la carne firme y su elevado Brix. Los clientes extranjeros son exigentes y demandan diversas variedades: prime Giant, Bing, Dorotea, Lapins, Bertrana y Sweet Heart.
“Cada feria hortofrutícola tiene un potencial distinto”
Hablando de ferias hortofrutícolas, Victorio nos comenta que, para pequeños productores ecológicos, las ferias suelen quedar lejos, dada la inversión de tiempo y recursos que suponen. “Este ha sido nuestro primer año en Fruit Logistica y estamos realmente satisfechos. Apenas unos días después de la feria ya nos han contactado numerosos países, entre ellos Dubái, Kenia, Emiratos Árabes, Grecia, Países Bajos o Ghana”.
“Estamos valorando participar en Iberia Organic Food, una feria emergente con gran potencial para nuevos contactos. Fruit Attraction es más un punto de encuentro de relaciones ya tejidas y estables”, puntualiza Victorio Catalán.
Victorio Catalán (izq.) con Víctor Casado en Fruit Logistica
“El consumidor aún desconoce variedades interesantes de pera y manzana”
Cultivamos manzana Gala, Reineta, Ladina, Golden, Mandi, Red Chief, Fuji y Verde Doncella. Pero al final parece que el consumidor solo consume las conocidas o las que tienen mucho marketing. Sin embargo, las características organolépticas y nutricionales de las desconocidas son increíbles”, comenta Victorio.
"La mayoría de las manzanas y peras que exportamos van a mercados clásicos como Bélgica, Holanda y Dinamarca, donde solo las variedades más conocidas se consumen".
"Por dar un ejemplo, nuestras peras Ercolini y Blanquilla son muy atractivas, y también la manzana Fuji. La diferencia de temperatura entre la noche y el día crea unos cambios de color únicos en la fruta imposibles en otro contexto climático. Las condiciones extremas de contraste de temperaturas de los valles de montaña imprimen el carácter de esta fruta. El punto más bajo es 530 metros y el más alto, unos 900 metros. Los contrastes de 22 grados entre día y noche permiten las variaciones de color y recuperar sabor y calidad, características que son un valor añadido”, describe Victorio.
“La agricultura actual está en peligro de extinción”
“Hasta hace poco, hablar de ecología daba miedo, principalmente por la falta de conocimientos. En la mente de muchos agricultores, trabajar ‘sin botellas’ sonaba a ciencia ficción. Nuestra fuerza es tener colaboradores entregados, como el técnico y catedrático de la Universidad de Barcelona especializado en agricultura ecológica, Andreu Vila. Nos ha asesorado y transmitido conocimientos muy valiosos de forma generosa para así avanzar. También las técnicas de campo Mar Anesto, Ana Juan y Ana Lafita”, explica Victorio.
Victorio nos cuenta la situación del sistema agrícola actual: “Nuestra agricultura está en peligro de extinción pero el sello de calidad nos preserva. La realidad es alarmante, se oyen motosierras todo el día, son las de los agricultores arrancando los frutales de fruta de hueso y pepita. La competencia de precios y las grandes cadenas les obligan a abandonar el campo”, comenta Victorio. “Muchos agricultores se quedan en el paro o se hacen camioneros, lo que aumenta la despoblación. Esperamos que a nadie se le ocurra comprar todas las fincas pequeñas para uniformizarlas y mecanizar a gran escala… sería una gran pérdida, ya que la paradoja es que nosotros sobrevivimos por ser pequeños y de línea ecológica”, destaca el miembro de Saltamontes Bio.
Una historia y un sueño de repoblación
Saltamontes Bio está formada por un grupo de mujeres y hombres de la comarca de Calatayud, que cuidan un total de 200 hectáreas de frutales ecológicos. Con una producción de casi 2 millones de kilos, los asociados en este proyecto son Fina Martínez, Víctor Casado, Alberto Estella, Victorio Catalán, Eduardo Bernal, Marisa Rubio y José Luis Herrero, pero esperan seguir creciendo.
“Nuestro sueño es que esta zona despoblada crezca y se mantenga el paisaje agrícola. No podemos competir con los precios de la línea convencional, pero sí vivir de nuestra agricultura ecológica”, concluye convencido Victorio Catalán.
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Victorio Catalán
Saltamontes Bio
Agricultura familiar y sostenible
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