Reino Unido importa numerosas hortalizas españolas: espinacas, lechugas, brócoli, tomate, apio, coliflor y un largo etcétera. También todo tipo de fruta, mayormente cítricos, fruta de hueso, etc.
“Los productos hortofrutícolas españoles tienen buena reputación en el Reino Unido, sin contar que es un mercado dispuesto a pagar por productos con valor añadido”, comenta José Miguel Flavián Erlac, de GM&Co, desde Londres. Y prosigue: “La cultura gastronómica del Reino Unido es particular, no hay tantas reservas en aceptar novedades como en otros países europeos. El consumidor británico es ecléctico y busca una mezcla de funcionalidad, comodidad, novedades y productos premium”.
También es un consumidor dispuesto a pagar más por atributos que valoran, como el comercio justo, productos locales, el bienestar animal, etc. En otros países se aprecia el sello ecológico, pero no se paga por otros atributos diferenciadores.
Conectar el consumidor con el campo en el punto de venta
“La estrategia comercial del Reino Unido es distinta a la europea: los supermercados conectan al consumidor con el campo en los puntos de venta. Existe una voluntad de explicar la evolución de un producto en su contexto agrícola al cliente final. Para dar un ejemplo, en una campaña de espárrago en el Reino Unido, tras una semana de fuertes canículas, los espárragos crecieron torcidos. En lugar de no considerarlos aptos para la comercialización e importar de otros países, las cadenas pusieron carteles explicando la situación y la razón por la cual el espárrago tenía un aspecto inusual. El resultado no pudo ser más positivo. Cuando el cliente siguió comprando una vez informado”, explica Miguel Flavián.
Reino Unido podría cerrar acuerdos con Marruecos o Egipto
"Llevamos mucho tiempo hablando del brexit y analizando las consecuencias, pero hay que relativizar. El brexit va a cambiar de forma radical las relaciones del Reino Unido con su principal suministrador hortofrutícola: España. No solo el flujo de frutas y hortalizas se verá afectado, sino también una infinidad de productos europeos como la carne, el vino, el queso, los yogures, etc.", señala Miguel Flavián.
"Dado que desde el 1 de febrero el Reino Unido puede negociar acuerdos comerciales con terceros, existe un riesgo real de que Marruecos o Egipto se apoderen de una parte de mercado que hasta ahora pertenecía a España. Son países con los mismos productos y las mismas épocas de campaña: un riesgo real para la agricultura española. Sin embargo, España está vinculada a toda Europa y no puede negociar de forma directa con Gran Bretaña.", puntualiza Miguel.
"Nuestra relación de negocios con el Reino Unido ha sido buena y estable, pero tal vez sea positivo minimizar nuestra dependencia, como lo ha estado haciendo este último año Países Bajos, preparándose para el peor caso posible: el no acuerdo. Buscar nuevos mercados es una opción, pero también lo es dar con productos diferentes, más premium o aportar variedades nuevas. O centrarse en los productos de convenience, que no siempre son mucho más caros que los commodity. Estas alternativas nos permitirían adelantar a una competencia con menos know-how en el cultivo o comercialización de productos especiales.", concluye el director de GM&Co.
Empresas españolas se registran en el Reino Unido
Otra alternativa que estimula el Gobierno británico es que las empresas españolas establezcan oficinas o asienten intermediarios en territorio británico para obtener un registro y así agilizar el tránsito de mercancías y los trámites aduaneros.
"Es evidente que el Gobierno británico tendrá que crear infraestructuras. Hasta ahora el túnel y los ferris tenían un flujo sin fricciones que puede convertirse en lento y aparatoso creando retenciones y retrasos en las entregas."
"Además, si los servicios (financieros, logísticos, etc.) quedan fuera de los tratados de libre comercio, se añadirá un escollo. El comercio de frutas y hortalizas depende de la industria auxiliar y de servicios que tal vez no se contemplen en los acuerdos. Todo ello puede entorpecer el flujo de transporte; por dar un ejemplo simple, que muchos camiones tengan más dificultades para volver con carga desde el Reino Unido, aumentado el coste."
El período de transición va hasta el 31 de diciembre del 2020. “Es poco tiempo para la envergadura económica que supone”, afirma Miguel Flavián.
Miguel Flavián Erlac, director de GM&Co, nos atendió desde Londres
Los cuatro mayores supermercados británicos dejan de crecer
Según GM&Co, la aplicación de tarifas aduaneras a la mayoría de productos no la puede absorber exclusivamente la cadena de producción y distribución, y el consumidor británico pagará más o consumirá menos.
“La poca confianza actual ya afecta a la economía: la gente gasta menos, el mercado de consumo está estancado. Los cuatro grandes supermercados británicos (Sainsbury´s, Tesco, Morrison, Asda) han dejado de crecer este último año”, informa Miguel Flavián, y sigue: “El Gobierno británico está avisando del riesgo de que no haya acuerdo. Es el peor escenario, pero hay que contemplarlo. Como decía Benjamin Disrael, estoy preparado para lo peor, pero espero lo mejor."
GM&Co, The Food knowledeg Company, asesora a centrales de semillas, agricultores, fabricantes, especialistas en tendencias, comercializadores, etc., sobre el mercado hortofrutícola y alimentario en el Reino Unido.
Más información:
José Miguel Flavián Erlac, director
GM&Co, The Food Knowledge Company
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