Con motivo de la primera edición en Sicilia de la House Fair de la compañía obtentora Enza Zaden, se celebró una conferencia titulada "Mercados y oportunidades" el pasado 27 de febrero de 2020.
Arriba y abajo: exposición de tomates de Enza Zaden
El análisis del mercado europeo fue confiado a Hans-Christoph Behr, de la consultora agrícola alemana AMI, quien proporcionó una visión general de los principales países productores, exportadores e importadores de tomate fresco.
El principal país productor europeo de tomates frescos es España, que también es un exportador y consumidor importante. En contraste, las exportaciones italianas de tomates frescos se topan con algunas dificultades. Esto, según el ponente, se debe a que la oferta varietal italiana es muy amplia, con especialidades que a menudo son desconocidas en el extranjero y que, aunque se pagan bien en el mercado nacional, no reflejan el mismo beneficio en otros países. En resumen, Italia tiene demasiadas especialidades que se promocionan muy poco desde un punto de vista comercial.
Un momento de la intervención de Behr
Entre los principales países exportadores de Europa, los Países Bajos se están forjando una posición de liderazgo a pesar de no tener una producción muy grande ni un consumo interno notable. Sin embargo, gracias a una nueva propuesta varietal de calidad y al cultivo en invernaderos en un ambiente controlado y bajo luz artificial, los Países Bajos lograron escalar posiciones después de muchos años en los que el tomate holandés se consideraba una “bomba de agua”, es decir, un producto grande pero insípido.
En todas partes, excepto en Bélgica, donde la producción de tomates redondos tiene una larga tradición, el segmento de tomates cherry y datterino está creciendo. Obviamente, esta producción requiere instalaciones adecuadas de cultivo en invernadero.
El experto de la consultora alemana Ami
En Francia hay una tendencia similar, al igual que en Alemania. En Bélgica, por otro lado, la producción es estable, pero la superficie está aumentando, lo cual significa que el modelo de cultivo está cambiando, apuntando a variedades más pequeñas, con rendimientos más bajos, pero económicamente más rentables. Solo en Gran Bretaña la producción disminuye: esto se debe a la elección de variedades más pequeñas y con menores rendimientos, pero en parte también se deriva de la incertidumbre debida al brexit, que hace que las empresas pospongan las inversiones.
En Italia, como se mencionó, existe una amplia y excelente variedad de especialidades de tomate fresco, que, sin embargo, solo se conocen en el mercado interno.
La audiencia de la conferencia, desafiando al coronavirus...
Las exportaciones de tomates frescos se llevan a cabo principalmente a otros países de la Unión Europea, especialmente después del veto ruso.
En las importaciones a Europa, Marruecos desempeña un papel de liderazgo, con una cuota del 20% de todas las importaciones. La presencia de Turquía, que envía tomates principalmente a Alemania, es menos relevante.
Alemania es el principal país importador y es abastecido en gran parte por España y Países Bajos, cuya cuota de mercado se ha incrementado mucho. Marruecos crece a expensas de España. Cabe señalar que los diferentes tipos de tomates se exportan a diferentes países, lo que demuestra que no hay dos mercados iguales dentro de la UE.
Italia exporta principalmente a Austria y Alemania. Sin embargo, está perdiendo cuota de mercado en el segmento de los tomates cherry. Por otro lado, importa de manera continua tomates en rama de los Países Bajos.
Los precios de los tomates frescos en el mercado europeo tienden a ser más estables que los de otras hortalizas. Hay diferentes precios para los mismos tipos de productos de diferentes orígenes. No es tanto una cuestión de calidad, sino por la imagen del proveedor (reputación).
Los mismos tomates, precios diferentes (según el origen)
Las diferencias de precios son posibles en todos los segmentos. Hay precios de productos premium que alcanzan los 10 euros por kilo. Por ejemplo, los tomates locales en Alemania gozan de una muy buena reputación. Por un producto de cadena corta, el consumidor alemán está dispuesto a gastar mucho.
La hortaliza más popular entre los europeos
El tomate es el producto hortícola fresco más consumido en casi todos los países europeos (excepto el Reino Unido, donde la zanahoria ocupa el primer lugar). España, Italia y Polonia son los mayores compradores de tomates, especialmente en los meses de verano, pero si se observa el gasto medio de los hogares en los distintos países, las diferencias no son tan grandes.
El gasto per cápita no es muy diferente entre los varios países europeos.
La frecuencia de compra en Alemania está aumentando. Los tomates se están volviendo más pequeños y, en consecuencia, el tamaño del envase también, por lo que se tienden a repetir las compras. Alemania es el mercado con la mayor proporción de tomates cherry en las cadenas de descuento.
Behr también habló del consumo del tomate ecológico, que está aumentando en todas partes, pero sobre todo en Alemania (donde está creciendo todo el segmento de alimentos ecológicos).
Aunque Alemania es el país que posee el récord de gasto total en alimentos ecológicos, en países como Suiza y Dinamarca, el gasto per cápita es mayor.
No siempre es fácil cultivar un tomate cherry en régimen ecológico. La ventaja de Italia es que podría exportar tomates ecológicos cultivados en el suelo. Otros productores no tienen esta ventaja, como Países Bajos, donde el cultivo se realiza en sustrato, una técnica que no permite la certificación ecológica.
El consumidor no siempre está seguro de que las frutas y hortalizas compradas en el supermercado sean verdaderamente ecológicas. Por ello, las compras de estas referencias a menudo se realizan a través del comercio electrónico.
Abajo: foto grupal de Enza Zaden Italia con una tarta preparada para el final de la charla