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Gert Upton, de Schoonbee Landgoed

Un productor y exportador de cítricos de Limpopo comenzó a prepararse para la COVID-19 hace tres semanas

Mientras Sudáfrica registra sus primeras muertes por coronavirus, la producción de fruta continúa y la entrada del hemisferio sur en el mercado citrícola parece más positiva que el año pasado.

La fuerte demanda local y del hemisferio norte de cítricos, y particularmente de limones (debido a su alto contenido de vitamina C), más que de otras categorías como uvas, berries y fruta de hueso, es una razón convincente para que los citricultores continúen trabajando los próximos 21 días de cuarentena, pero no es fácil.

"Hemos visto un enorme caos con la información sobre la cuarentena, por lo que es difícil saber en qué confiar y qué es aplicable, pero las organizaciones agrícolas, AgriSA y AgriLimpopo, y AgriLoskop en nuestra zona, nos han ayudado muchísimo", dice Gert Upton (derecha), gerente de marketing y ventas en Schoonbee Landgoed, en las afueras de Groblersdal, provincia de Limpopo.

Schoonbee Landgoed ofrece limones gratis al personal y cuando comiencen las clementinas, también las ofrecerá en un esfuerzo por mejorar la inmunidad general.

La empresa, que abrió una clínica en la finca en 2018, comenzó a tomar precauciones hace tres semanas, al darse cuenta de la gravedad de la situación. La temporada de cítricos comenzó la segunda semana de marzo.

El personal de Schoonbee ha recibido mascarillas y guantes (fotos de Schoonbee Landgoed)

Dentro de dos semanas comienza la cosecha de clementina, poco después de la cosecha de Novas, seguida de la de limones hasta la semana 23.

Preparación para el coronavirus
Empezar temprano a prepararse les permitió obtener recursos como termómetros para la entrada de la finca (la temperatura de cada persona se mide al llegar), máscaras y desinfectantes de manos, aunque, según Gert, ya había existencias limitadas porque el sector alimentario en general también estaba comenzando a prepararse para una crisis.

Se instalaron puestos de lavado de manos en las zonas de trabajo y en las entradas a todas las instalaciones de envasado, y todos los canales de transporte se desinfectan regularmente. Se revisa continuamente la temperatura de todo el personal de la envasadora para garantizar un ambiente de trabajo seguro.

Tarjetas con instrucciones visuales y escritas en todas las entradas

Desde el lunes, cuando el presidente del país anunció la inminente cuarentena, han tenido que hacer una gran cantidad de papeleo, incluido el registro en el Departamento de Comercio e Industria y la Comisión de Empresas y Propiedad Intelectual sobre los servicios esenciales, organizando los permisos para el personal que indican que están realizando un servicio esencial.

Sus socios retailers han sido un gran apoyo, ayudándoles a abrirse paso en un laberinto de información, emitiendo certificados para que los conductores de camiones viajen a centros de distribución (sin paradas en el camino).

Hora del almuerzo y transporte público
En la finca, el tamaño de los equipos de cosecha se ha reducido de 100 a 30 o 40 para que los trabajadores estén más espaciados. La cantidad de fruta que ingresa a las envasadoras no se está viendo afectada, pero la administración laboral es más complicada.

Los trabajadores de la envasadora llegan a la finca antes que los cosechadores, para reducir la afluencia de personas. La mayoría del personal depende del transporte público, concretamente de minibuses. Por lo tanto, la empresa ha firmado contratos para garantizar que los conductores de minibús solo transporten al personal de Schoonbee, garantizando que los vehículos estén debidamente desinfectados y controlados. También han reducido la cantidad de personas por vehículo y duplicado el número de vehículos disponibles para el transporte.

Gert señala que los puestos de envasado en su planta de cítricos están, afortunadamente, a un metro y medio de distancia, por lo que la distancia entre las personas no es el problema principal, sino mantener a las personas separadas durante la hora del almuerzo y controlar la proximidad en el transporte público, pues la gran mayoría del personal utiliza el minibús.

Puestos de lavado de manos antes de ingresar a la finca, tanto anteriores como recién instalados en respuesta al coronavirus
 
Gert comparte su preocupación debido a la falta de disciplina en general por parte de los ciudadanos, sin mencionar la pandemia, agravada por la falta de información e incluso la idea errónea de que es una enfermedad que solo es letal para los chinos. El nivel de interacción durante el encierro entre ciudadanos y la policía y el ejército está causando ansiedad.
 
"La gente todavía no cree que la pandemia le afecte personalmente", concluye. "Son momentos muy inciertos y vamos superando cada día. Mantenemos la calma, asegurándonos de que nuestra gente se mantenga sana mientras ayuda a alimentar a nuestro país y otros en ultramar, junto a nuestros compañeros agricultores".
 
Gert piensa que la crisis podría resaltar de nuevo la importancia vital del sector agrícola en Sudáfrica.
 
 
Para más información:

Gert Upton
Schoonbee Landgoed
Tel.: +27 13 262 4000
Email: marketing@schoonbee.co.za
http://schoonbee.co.za

Fecha de publicación: