Una máquina clasificadora de batatas en el continente europeo. En el momento de escribir este artículo, era algo novedoso. En marzo de este año, la empresa holandesa GreenGoose adquirió esta máquina calibradora y clasificó sus primeras batatas. Pero, en ocasiones, lo novedoso debe demostrar su valor en el mercado, y el propietario de GreenGoose, Christiaan van der Goes, está seguro de que esta máquina puede hacerlo.
Christiaan fundó GreenGoose en noviembre de 2017 y decidió poner todo el foco en la importación y exportación de batatas para los mayoristas, retailers y verdulerías de Europa. El importador también abastece al sector de la industria. Por ejemplo, el producto se transforma en batatas fritas. La empresa puede suministrar estos tubérculos todo el años importando de África y de los Estados Unidos. Para este fin, GreenGoose tiene 100 hectáreas de cultivos propios en Egipto y 200 hectáreas en los Estados Unidos, ambas explotaciones gestionadas mediante joint ventures.
En marzo de 2020, la empresa instaló una nueva máquina clasificadora y envasadora única en el edificio de Delta Fresh en los Países Bajos, donde GreenGoose clasifica sus batatas. "Llevábamos buscando unam ñaquina así 18 meses", dice Christiaan. "No encontrábamos nada que se adaptase a nuestras necesidades, pero, al final, encontramos un fabricante adecuado y unimos fuerzas para diseñar esta máquina".
Garantía de calidad
"Nuestras batatas se clasificaban y preparaban todas para la exportación en su país de origen. Nos llegaban los pedidos desde Egipto y los Estados Unidos en cajas paletizadas de 6 kilos. A la llegada a los Países Bajos, se comprobaba aleatoriamente la calidad de algunas cajas por palé, por lo que siempre existía la posibilidad de que los clientes recibieran batatas de calidad inferior, ya fuera por pudrición, moho o daños producidos en el transporte. Ahora, ofrecemos a nuestros clientes unos productos que han sido todos sometidos a un control de calidad".
"Eso es gracias a la nueva máquina. Todas las batatas pasan por la máquina el día de su llegada, y comprobamos su calidad. A continuación, las envasamos para el cliente. Estamos estableciendo una garantía de calidad gracias a que el producto se clasifica en los Países Bajos", explica Van der Goes. "Eso significa que hay menos desperdicio y te aseguras de vender, pongamos, 100 cajas en lugar de solo 70 después de haber tenido que descartar 30".
La clasificación de las batatas en su país de origen casi siempre se hace en un embalaje estándar de 6 kilos. "Ahora que podemos clasificar en los Países Bajos, hay más opciones. Por ejemplo, podemos clasificar las batatas no en cajas únicamente, sino también cajones de plástico como EPS e IFCP, y en envases de varios pesos".
"Esta máquina la usamos también para nuestra marca propia GreenRoots. También podemos clasificar las batatas por peso para los clientes, algo que nos demandaban, en especial empresas que quieren incluir las batatas en paquetes de ingredientes. Por ejemplo, querían incluir 200 gramos de batata como estándar en el paquete", añade Christiaan.
Menos desperdicio
Enseguida se plantea la cuestión del coste. Siempre es más barato clasificar el producto en el país donde se cultiva. "Sí, es más caro que clasificar en Egipto, por ejemplo, pero eso solo importa si los clientes europeos no hacen nada con las batatas. Para aquellos que reenvasan los productos con su marca propia, esta nueva solución es más rentable. Podemos hacer una clasificación muy eficaz con esta máquina. Y tampoco lo único que importa es el dinero".
"Como se ha mencionado antes, la garantía de calidad influye. Hay menos tiempo de inactividad y tus clientes quedan satisfechos. A los clientes no les agrada que las batatas estén magulladas. Durante la clasificación, retiramos las batatas dañadas y les damos una segunda oportunidad como productos transformados. También esto hace que la clasificación en los Países Bajos sea más sostenible. Lo único que tiramos alguna vez son las batatas que están podridas", apunta Christiaan.
Ventajas para los países productores
Según Christiaan, las empresas de ultramar también se benefician. "Clasificamos batatas egipcias. Los nuevos productores de los países emergentes tienen muchas menos oportunidades en el mercado europeo porque no se pueden permitir máquinas clasificadoras, por lo que lo tienen difícil para suministrar productos de calidad elevada. Ahora, podemos ayudarles. Les decimos a estos exportadores que se aseguren de tener un buen producto lavado y que nos lo envíen a granel".
"Nosotros nos encargamos del resto. Eso les ahorra tiempo a los agricultores para centrarse más en la calidad de las batatas. Con esta máquina clasificamos de acuerdo con la demanda del mercado europeo". ¿Cuál es la diferencia entre este y los Estados Unidos? "Nosotros clasificamos por peso y los americanos, por diámetro", explica el importador. "Ellos la usan para determinar el calibre de la batata, pero eso no es siempre lo que quieren los clientes".
Superficie de cultivo en Europa
GreenGoose no pierde de vista los avances en la superficie de cultivo de batata en Europa. "Mi principal interés en el mercado actual seguirán siendo las importaciones. El cultivo local de batatas, básicamente, nos ofrece más oportunidades. Somos los únicos del mercado europeo que tienen una máquina así, pero, a la vista de la demanda de ese mercado, las importaciones seguirán siendo necesarias en el futuro".
Eficiencia, menos desperdicios, clasificación según la demanda y oportunidades para las empresas de ultramar; en general, Van der Goes está satisfecho con esta máquina. No le preocupa que los diseñadores se la vendan a otros clientes. "Eso significaría que hemos seguido el camino correcto", concluye Christian.
Más información:
Christiaan van der Goes
GreenGoose BV
Móvil: +31648264074
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www.greengoose.nl