La trasplantadora Wolf Pro está pensada para su uso profesional en cultivos con acolchamiento plástico como fresas, melones, sandías, tomates, lechugas, hortalizas en general y cáñamo, pero también se puede usar en terrenos sin acolchamiento.
"La Wolf Pro es adecuada para la plantación de plantones con cepellón de forma cónica, piramidal y cúbica hasta un máximo de 8 cm, y está equipada con un sistema de distribución, el primero en el mundo, que va de 1 a 8 perforadoras para una distancia de trasplante en las hileras de 25 cm a 2 m", explican desde la empresa.
Hay disponibles cuatro tipos distintos de perforadoras, en función de la forma y las dimensiones del sistema radicular. En particular, dos perforadoras de forma cónica están pensadas para las plantas alveolares y dos para las de fondo plano cúbicos prensado y no prensado.
Una de las principales características diferenciadoras es la posibilidad de regular la apertura de las perforadoras mediante un sistema de levas deslizantes. Esto permite variar la dimensión del agujero en el plástico, en función del tipo y de la dimensión del cepellón.
La distancia en las hileras es regulable a partir de un mínimo de 50 cm (30 cm para la versión Compact) y, por lo tanto, se adapta a todos los cultivos en hileras gemelas sobre alcolchamiento plástico, además de sobre materiales biodegradables y con manguera para riego por goteo.
"La máquina está equipada con un innovador dispositivo de riego eléctrico sincronizado que tiene el objetivo de regar los plantones con una cantidad de agua regulable, lo que reduce el estrés y acelera el enraizamiento. Un control mecánico garantiza la sincronización del chorro de agua con la posición de los plantones, mientras que una electroválvula acciona una sencilla bomba eléctrica para inyección del agua".
Los operarios se sientan de espaldas al tractor, para mantener el peso más cerca del enganche de tres puntos. El asiento está soldado al marco para no cargar las unidades de trasplante cerca de las ruedas compactadoras y, sobre todo, cuando hay acolchamiento plástico.
Las unidades de trasplante están equipadas con un paralelogramo en toda la longitud para adaptarse a las diversas condiciones del terreno sin perder incidencia de compactación ni estresar el material de acolchamiento.
Un práctico par de muelles transversales con ajuste de manivela permite aligerar o cargar las unidades de trasplante en función del peso de cada operario.
Otra singularidad es el innovador sistema de cambio de las perforadoras mediante unas prácticas aberturas con unos cárteres deslizantes colocados sobre los lados de las unidades de trasplante; con solo dos tornillos Allen se cambia de manera rápida y simple el número de perforadoras de la distribuidora y el consiguiente intervalo de trasplante.
En correspondencia con el número de perforadoras, se obtiene una distancia diferente de trasplante en la hilera; por lo tanto, 8 perforadoras y 8 distancias. El resultado es poder trabajar siempre con la distancia de trasplante considerada óptima, es decir, la que permite un menor "desgarro" del plástico de acolchado.
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