El jengibre disponible en el mercado no es mucho comparado con la demanda, y los precios siguen siendo interesantes. En esta época el producto proviene mayoritariamente de China, Brasil y Perú, en orden descendente de importancia. La producción italiana todavía es muy limitada.
Hace tres días, en un supermercado en el norte de Italia, el jengibre procedente de Perú a granel estaba a la venta por 5,59 euros/kg. El jengibre ecológico, también de Perú y envasado en Italia, costaba aproximadamente el doble (9,93 euros/kg).
Durante el confinamiento hubo escasez de producto causada tanto por problemas logísticos como porque los países productores exportaban menos. Luego, con el verano y el otoño, la situación se reequilibró, pero los precios se mantienen fuertes.
Otro problema radica en que para producir jengibre se parte del rizoma y, siendo la demanda y el precio altos, en los países productores ha habido un mayor interés por vender la mayor cantidad de rizomas posible.
Las cantidades actualmente enviadas habrían sido demasiado elevadas hace 10 años, pero en los últimos años la demanda se ha multiplicado por diez y el mercado italiano también ha comenzado a hacer cada vez más pedidos. De hecho, el jengibre es visto como un vegetal con altas propiedades nutracéuticas, especialmente como un poderoso antiinflamatorio.