En el capítulo sobre Sudáfrica del seminario web mensual ofrecido por Produce Marketing Association en colaboración con Max MacGillivray, de Beanstalk, se han tratado los intensos esfuerzos que el sector sudafricano de la uva de mesa está haciendo por adaptarse a lo que el mercado quiere.
El valle del río Hex tiene "unos buenos 4 millones de cajas más" todavía por envasar esta temporada. Las llegadas a finales de la semana 9 se situaron por encima de los 17 millones de cajas, por lo que en SATI están bastante seguros de que, como mínimo, se llegará a la estimación a la baja de 20,6 millones de cajas.
La semana 8 fue lenta por las restricciones logísticas, pero los volúmenes de exportación se recuperaron en la semana 9 y, según Clayton Swart, gerente de comunicaciones de la South African Table Grape Industry (en la foto), están "empezando a ver un poco de recuperación en términos de retraso de la temporada".
Ha sido una temporada de uva de mesa "desafiante y difícil", según dice, pues el ritmo de carga en el puerto de Ciudad del Cabo se retrasó por la niebla y el viento, a lo que se sumó la falta de contenedores y la COVID.
Las lluvias de las dos últimas semanas afectaron sobre todo a la Crimson que quedaba por cosechar, el cultivar más ampliamente plantado en el río Hex. Clayton indica que la Crimson soporta la lluvia bastante bien y se esperan daños mínimos (aunque aún se está evaluando la afectación).
Arriba a la izquierda, Max McGillivray. Arriba a la derecha, Lianne Jones, gerente de país de PMA Sur de África. Abajo a la izquierda, Heidi de Villiers, de IFG. Abajo a la derecha, Charl du Bois, de Capespan (ante un viñedo de Sweet Celebration)
Expansión de la uva de mesa
La superficie de uva de mesa en Sudáfrica ha pasado de 13.000 hectáreas hace una década a más de 21.000 hoy, con un incremento particular entre 2014 y 2018 (el agua es una restricción a la expansión de la uva de mesa).
Eso incluye un incremento considerable en rojas sin semillas: para 2011, la categoría suponía un 29% de la cartera del sector, para 2018 suponía un 40%. En el mismo periodo se produjo un leve descenso de las blancas sin semillas: de un 33% a un 27%.
Clayton hace referencia a los enormes gastos y los grandes riesgos de los viticultores a la hora de renovar sus viñedos con variedades de una vida de un máximo de 20 años en una era en la que las preferencias del consumidor cambian cada año.
Las variedades con semillas casi han desaparecido, tan solo el 3% de los viñedos actuales todavía las cultivan.
También hay un mayor surtido de parcelas más pequeñas de variedades patentadas. El crecimiento de la superficie se estancará, pero los volúmenes continuarán creciendo porque los rendimientos serán mayores y más consistentes.
Todas las variedades abiertas han retrocedido significativamente en superficie: Autumn Royal un 76%, Flame un 52%, Red Globe un 46%, a excepción de la resistente Crimson (que se espera que demuestre lo que vale tras las lluvias del valle del río Hex), de la que se ha plantado un 35% más de superficie en este periodo.
Más variedades patentadas que variedades abiertas
En contraste, las variedades patentadas ahora suponen más de la mitad de todos los viñedos de uva de mesa de Sudáfrica. Juntas, Sweet Globe, Autumn Crisp y Sweet Celebration suponen casi el 5% de la superficie de Sudáfrica.
Heidi de Villiers, gerente comercial de International Fruit Genetics para África y Oriente Medio, presentó algunas variedades nuevas (Julep tiene un sabor picante con un toque de menta, mientras que Kokomo tiene un sabor tropical) de las que debería haber volúmenes limitados en el mercado dentro de dos a tres años.
"Debido a que se han plantado tantas rojas sin semillas en los últimos años, escasean las blancas sin semillas, y esto lo vemos en los nuevos pedidos para los próximos años", dijo.
Señaló el valor de las uvas de mesa en la reducción del consumo de dulces en niños.
Kandas Cloete (en la foto) es economista agrícola en la Oficina de Políticas Alimentarias y Agrícolas (BFAP, por sus siglas en inglés), especializada en cultivos hortícolas como uvas de mesa, de las que se exporta el 89% de la producción; son el tercer mayor contribuidor a las exportaciones agrícolas de Sudáfrica. Hay 271 productores de uva en 643 unidades de producción.
"Vemos que el impacto del tipo de cambio es bastante considerable en el sector de la uva de mesa", afirmó. "Se espera que los precios reales en euros bajen ligeramente y en rands que se mantengan bastante estáticos. Si bien el tipo de cambio respalda los precios, los costes de los insumos se ven afectados". Actualmente rondan los 60 rands o casi 7 euros por caja (FOB), según las cifras de la BFAP.
Dados los factores de riesgo como las lluvias, la agencia considera que las uvas de mesa son un sector sano donde los productores saben lo que hacen y que continuará prosperando, indicó Cloete.
Uvas de mesa: empleador muy prominente en el sector agrícola
Charl du Bois, ejecutivo comercial en Capespan, ofreció una visión general de las muchas actividades de responsabilidad social corporativa y ayuda alimentaria en los que el sector de la uva de mesa participa.
Solo los arándanos dan trabajo a más personas por hectárea, pero su superficie es mucho menor; por cada mil hectáreas de viñedos de uva de mesa, se crean aproximadamente 2.250 oportunidades laborales.
El South African Table Grape Industry cuenta con un fondo para brindar asistencia económica a los viticultores negros en la sustitución de variedades antiguas con las nuevas que se buscan ahora y que se han mencionado arriba, en un intento por abordar las barreras a la entrada de nuevos exportadores de uvas.