A pesar de las limitaciones del canal horeca por las restricciones derivadas de la pandemia, las ventas de melón y sandía están desarrollándose bien en España debido a un buen balance entre oferta y demanda. Y es que los españoles tienden a consumir cada vez más melón y sandía durante todo el año si hay disponibilidad. Si bien hay buenas sensaciones para las próximas semanas, falta por ver cómo enlazará la campaña de Senegal con el inicio de las cosechas españolas, que apuntan a empezar con más volúmenes este año.
“La verdad es que las ventas de melón y sandía no van mal. A pesar de que en época de pandemia el canal horeca ha dejado de operar bastante, siendo uno de los canales que absorbe este tipo de productos durante todo el año con mayor volumen, vemos que se mantiene la demanda de estos productos por parte de los consumidores”, explica Vicent Mingarro, del departamento de ventas y marketing de Frutinter.
“Al ofrecer buena calidad y sabor de estas referencias, el consumidor no las deja de lado. Cada vez más, la ciudadanía continúa consumiéndolas durante más tiempo, ya que están muy presentes en la dieta mediterránea. Si pueden disponer de ellas, siguen consumiendo. Además, están considerados como productos muy saludables”, sostiene.
De acuerdo con Vicent Mingarro, las perspectivas para lo que queda de campaña de melón de importación son “normales”, dado que no cree que la oferta vaya a superar a la demanda. “Ahora bien, para las cosechas nacionales, empezando por Almería, habrá que ver ese ajuste, ya que parece ser que la cosecha nacional viene con más volumen –pues ha habido un incremento en la superficie plantada– y no especialmente con mayor precocidad”.
Después de los cítricos, son estas frutas de verano los productos que en más volumen trabaja esta compañía castellonense, que pretende alcanzar esta campaña una comercialización de alrededor de 16.000 toneladas de melón –entre los que figuran los tipos piel de sapo, amarillo y galia– y unas 9.000 toneladas de sandía negra, negra sin pepitas rayada y Fashion.
Durante el periodo estival, Frutinter comercializa melones y sandías españolas, mientras que en época de contraestación hacen llegar estos productos de Brasil y Senegal, con tal de asegurar un suministro ininterrumpido durante todo el año a aquellos clientes que lo solicitan.
“En Brasil tenemos fincas propias para enlazar con el final de la campaña española. Al acabar Brasil suele tomar el relevo en el suministro Senegal. El final de la campaña brasileña depende bastante de la evolución de las condiciones meteorológicas. Si llueve demasiado durante las últimas cosechas en Brasil, se termina abruptamente la temporada, lo que puede provocar un ligero déficit en el suministro. Por ello, se plantean también algunas plantaciones en países de Centroamérica y se planifican solapes para las primeras llegadas de Senegal. Concretamente, este año ha habido buena convivencia entre los distintos orígenes”, explica Vicent Mingarro.
El principal mercado para el melón y la sandía de contraestación es el nacional. “En plena campaña nacional sí que enviamos producto fuera, mayormente a Europa. Aunque la caída del turismo en verano contrae la demanda del canal horeca y provoca una caída en las ventas, que no se recuperan con el incremento de los demás canales”, lamenta.
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