La temporada de coliflor inglesa ha sido buena hasta el momento, pero las bajas temperaturas durante todo el mes de abril han supuesto un ligero descenso de los volúmenes.
"La demanda ha sido buena", afirma Shane Talling, de Veg-UK. "Eso, combinado con una oferta limitada, significa que los precios han sido fuertes. La oferta general es un poco inestable en este momento debido al tiempo tan cambiante".
La semana pasada llovió y el tiempo fue cálido, lo que ha impulsado los calibres, pero se prevé una brecha en la oferta antes de que se ponga en marcha la cosecha de verano.
"Algunos productores están guardando coliflores en el almacén para intentar cubrir la brecha, lo que influirá en los precios en las próximas semanas. De cara a la cosecha de verano, que tendrá lugar dentro de 4-5 semanas, estamos pensando en volver a exportar a clientes de Alemania, Italia y Escandinavia".
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Shane Talling
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