La campaña de la ciruela avanza en España en un contexto muy favorable, en el que las producciones del resto de especies de frutas de hueso se han visto mermadas en todo el continente europeo por una meteorología adversa en la primavera. Extremadura, y concretamente Badajoz, es la “cuna de la ciruela en Europa”, como lo define José María Naranjo, Sales & Market Development Manager en Tany Nature, y allí trasladará la compañía sus operaciones de recolección tras comenzar en Andalucía occidental con la campaña de las variedades tempranas.
“Venimos del año pasado en el que las producciones fueron limitadas y la calidad fue algo baja. Este año contamos con una producción normal, pero lo más importante es la calidad que disponemos”, explica el profesional. “En el invierno hemos tenido las horas de frío necesarias para que la producción funcione y no hemos tenido ninguna incidencia climática ni en la floración ni en el periodo de engorde del fruto, al contrario de lo que ha ocurrido este año en muchas zonas productoras, que se han visto afectados por tormentas y heladas. Todo eso nos ha llevado a obtener una calidad excepcional: desde el interior del fruto, donde no ha habido ningún tipo de problema asociado a desajustes fisiológicos, hasta la parte externa, porque además no tenemos problemas de rozado ni daños por granizo. Desde el primer momento el consumidor está consumiendo una ciruela de calidad”, subraya.
De acuerdo con José María, la producción de fruta de hueso de la compañía se elevará a los 68 millones de kilos esta temporada, que se prolongará hasta noviembre, y a partir de la semana que viene dará inicio la cosecha en sus producciones de Vegas Altas, que habrán alcanzado su maduración óptima para salir a los mercados. “Sin embargo, hay algunos productores comenten el error de adelantarse y comienzan a recoger la fruta antes de su momento optimo. Es el mal endémico que tiene el sector: en un año en el que la calidad es espectacular, la fruta alcanza pronto una buena coloración y tiene cualidades muy pronto, se puede caer en el error de recolectar antes de tiempo”, alerta.
“Es importante remarcar que en Tany, al ser tanto productores como envasadores, podemos gestionar la campaña de una manera eficiente y sobre todo sostenible. Porque uno de los grandes conceptos para nosotros es la sostenibilidad, entendida desde 3 pilares fundamentales: sostenibilidad económica, el campo tiene que ser rentable, eso nos permite innovar y sorprender cada año a nuestros clientes; sostenibilidad medioambiental; y sostenibilidad social, ya que cada hectárea de cultivo genera 1,5 puestos de trabajo, por lo que de esta manera estamos evitando la despoblación en las zonas rurales”.
“El productor se ha dado cuenta de que no puede estar produciendo por debajo de los costes al subir estos cada año”
Tany Nature está fuertemente orientada a la exportación. Sus ciruelas, su producto estrella dentro de su gama de frutas de hueso, llegan a 58 mercados mundiales. No obstante, el último año ha sido convulso a muchos niveles para todo el sector exportador de la comunidad autónoma que, además de enfrentarse al enorme desafío que supuso la pandemia y a la incertidumbre que sembró el brexit -y que se mantuvo hasta el acuerdo alcanzado con la Unión Europea in extremis-, tuvo que hacer frente al cierre del mercado brasileño a las ciruelas españolas. Y todo ello sumergido en una preocupante crisis de rentabilidad.
“El campo no puede estar produciendo por debajo de los costes" Todos los productos han tenido una subida de costes bastante importante en los últimos años, no solamente a nivel salarial con un 38%, sino que también los insumos han subido en torno a un 18%. Estamos hablando de unos costes muy elevados (un 56% en los dos últimos años), arrastrando ya una problemática en este sentido. Por eso el agricultor tiene que ponerle un precio digno a su producto”, sentencia.
“En Extremadura se arrancaron el año pasado 2.800 hectáreas de frutales de hueso. Pero lo que se han arrancado no son solo árboles, son fruticultores, que han tenido que dejar su actividad”, subraya. “Los productores de fruta de hueso llevan años con pérdidas de rentabilidad y eso solo es sostenible hasta cierto punto”:
“Por eso tenemos que hacer ver que nuestro sector lo que necesita es dinamismo, y un dinamismo de 360 grados. No solo el productor tiene que estar siempre pendiente del tiempo o de qué es lo que pasa, también la administración pública tiene que volcarse con nosotros, ya que somos de los cultivos mas sociales que existen. No solo incentivando la apertura de nuevos mercados, sino evitando que se nos cierren y que nos pongan trabas que nos impidan exportar nuestro producto con cierta dignidad”, expone José María Naranjo.
China, de hecho, ha sido uno de los últimos mercados abiertos para la fruta de hueso de España, que obtuvo la autorización tras una dilatada negociación entre ambos países. “En mi opinión el mercado chino es realmente de nicho, porque al final ellos son los mayores productores de fruta de hueso del mundo, y para llegar a ese mercado con un producto diferente al que ellos tienen, de mayor calidad, con un tiempo de tránsito de 30 días, hay que hilar muy fino. Todos debemos ser conscientes de que a los mercados tenemos que llegar con la calidad que requieren. En Tany Nature tenemos el know how para poder hacerlo, pero es un mercado que no permite errores y hay pocas empresas que puedan cumplir”.
“De todas maneras, nuestro ADN es el manejo adecuado de una fruta excelente hasta nuestros clientes y consumidores. Y si somos buenos en las largas distancias, somos excelentes en las cortas. Toda esa experiencia que hemos conseguido en mercados de ultramar nos permite atender el mercado nacional con una calidad extrema. Y para nosotros el mercado nacional es toda Europa”, concluye.
Para más información:
José María Naranjo
Tany Nature
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