En los Países Bajos, J.P. Beemsterboer Food Traders está ahora plenamente centrado en las cebollas nuevas. "Sin duda, todavía queda algún buen lote de cebollas de la cosecha anterior, pero la temporada de exportación no europea está cerrada para esa cosecha", dice William Nannes. "En general, hay un estado de ánimo bastante negativo en el mercado de la cebolla por la cantidad de producto que todavía queda. El año pasado, las perspectivas en otoño eran mejores. Sin embargo, las cosas resultaron un poco diferentes de lo esperado".
"La temporada pasada constatamos que cuanto más se anuncia que habrá escasez, más difícil es que los compradores busquen alternativas. Los productores tienen todo el derecho a intentar hacer subir los precios, pero si ese aumento no está basado en la demanda, el efecto es el contrario al deseado. Especialmente si los precios de las pacas suben por encima de aproximadamente 0,25 euros. Entonces las cosas se ponen difíciles. Nos hemos dado cuenta de que no podemos estar seguros de que las cebollas se venderán hasta que, de hecho, se venden. Esto no era así en enero".
"Los precios de las cebollas de nueva cosecha rondan los 0,30 euros. Esta semana bajarán aún más, así que los clientes siguen prefiriendo esperar. Todavía no hay demasiadas cebollas disponibles. La causa de esto ha sido un exceso de humedad, pero ahora está todo cada vez más seco. Esperamos retomar pronto las exportaciones a África y Centroamérica. Creo que podremos, a pesar de que, por ahora, sigue habiendo escasez de contenedores. En cualquier caso, las cebollas están creciendo bien. Con precios a niveles medios, puede que incluso logremos otro récord de exportación esta temporada", concluye William.
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William Nannes
J.P. Beemsterboer Food Traders
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