Con 5.121 hectáreas, la superficie sembrada de ajo en Andalucía en la campaña 2021/22 ha descendido en un 1,2% respecto a la campaña anterior, siendo la reducción de la producción algo superior, de un 3,5%, al totalizar 65.940 toneladas, de acuerdo con la síntesis de la campaña publicada recientemente por el Observatorio de Precios y Mercados de la Junta de Andalucía con datos hasta octubre (cabe recordar que el ajo sembrado a finales de 2020 se desarrolla durante 2021, recolectándose en mayo-junio de 2021 y se comercializa durante el segundo semestre de 2021 y el primero de 2022). En cuanto a los rendimientos, en la campaña 2020/21 se fijaron en 13.184 kg/ha, mientras que en la campaña 2021/22 se han situado en 12.876 kg/ha, cifra que supone una reducción interanual de un 2,3%.
La provincia de Córdoba es la mayor productora de ajo de Andalucía, concentrando el 38,7% de la superficie y el 41,2% de la producción. Le siguen Granada, con el 21,0% de la superficie y el 20,4% de la producción, y Sevilla, con el 18,6% de la superficie y el 19,3% de la producción.
Es de resaltar esta campaña el incremento del 13,1% en la superficie de ajo y del 24,9% en el rendimiento medio del cultivo en la provincia de Córdoba, así como la caída del 20,8% de las hectáreas en producción en Sevilla.
Incidencias en la campaña
"En líneas generales, la campaña de ajo 2021/22 ha estado marcada por las buenas condiciones meteorológicas, que permitieron una buena cosecha de ajo, con buenas calidades y buenos calibres", destaca el informe.
Respecto a las variedades, se mantiene el predominio del ajo Spring temprano, que representa alrededor del 80% del ajo andaluz, y se ha incrementado ligeramente la siembra de ajo rojo, mientras que el ajo blanco ha desaparecido casi por completo.
Sin embargo, este año la escasez de agua será un elemento clave en la planificación del cultivo del ajo, pudiendo afectar en el desarrollo normal de la próxima campaña. “Como principal consecuencia de esta situación”, según ha informado la Junta, “algunas entidades señalan reducciones de la superficie de cultivo de ajo en zonas de producción de Andalucía y, en otros casos, se indica que parte de la producción de ajo se ha dirigido a otras zonas productoras de Castilla-La Mancha, región en la que se esperan dotaciones de riego mayores que en Andalucía”.
Comercialización
La pandemia, el cierre de fronteras y las limitaciones de China para realizar los fletes de ajo en las condiciones que lo venían haciendo hasta el estallido de la crisis sanitaria hicieron que la campaña anterior (2020/21) estuviera marcada por precios elevados. “Tras esto, en la nueva campaña de comercialización 2021/22 los primeros ajos se vendieron muy rápido y los precios comenzaron bien, con cotizaciones que fueron subiendo progresivamente, si bien, desde octubre de 2021 han tendido a estabilizarse, con cotizaciones aceptables, que permiten ciertos beneficios para los productores o hacen que no se generen pérdidas”.
En cuanto al comercio exterior, "elemento clave en el sector del ajo", el Observatorio destaca “el buen funcionamiento de las exportaciones, con países como Estados Unidos que continúa adquiriendo ajo a buenos precios. Por su parte, Brasil, país que solía comprar gran cantidad de ajo, en 2021 no lo ha hecho, si bien este hecho no ha repercutido en el precio del ajo”.
No obstante, los stocks actuales de ajo son algo más elevados que los de otros años, “lo que genera cierta incertidumbre en el sector”, puntualiza el Observatorio.
Cotizaciones en origen
En la campaña 2021/22, el precio medio en origen –con datos hasta octubre– ha sido de 0,93 €/kg, un 9,6% por debajo del valor alcanzando en la campaña precedente (1,02 €/kg) y muy similar al de la campaña 2019/20 (0,90 €/kg). Es necesario señalar que en la síntesis de la campaña 2021/22 realizada por el Observatorio de Precios y Mercados únicamente se dispone de cotización para el ajo Spring.
Cotizaciones a la salida del centro de manipulación
Finalmente, tras las últimas dos campañas en las que los precios medios a la salida de la central de manipulación evolucionaron positivamente, alcanzando valores de 2,20 y 2,51 €/kg en 2019/20 y 2020/21 respectivamente, en la campaña 2021/22 las cotizaciones se han contraído, situándose en 2,12 €/kg, un 15,6% inferiores respecto a la campaña 2020/21 y un 3,6% inferiores que en la campaña 2019/20.