"Con la llegada de diciembre, los pedidos extranjeros de clementinas han aumentado considerablemente tras haberse ralentizado un poco durante los últimos días de noviembre. Por ahora, este crecimiento está siendo impulsado por los países de Europa del Este, en particular Polonia, Eslovaquia y Hungría, hacia los que sale al menos un camión diario de nuestro almacén," explican Daniele y Nadia Martucci, director y responsable de envíos, respectivamente, de Martucci Srl en Massafra (Tarento).
"De hecho, estos clientes preferirían disponer de un suministro aún mayor, pero es imposible organizar el envío de grandes volúmenes para unos pocos destinos extranjeros, en un año en el que, además, han caído los rendimientos en todas las zonas italianas de cultivo de clementinas. Tenemos que garantizar la continuidad de los mercados francés y alemán, además de los nacionales", añaden.
"Parece que no hay suficientes clementinas. Estamos registrando una gran demanda de producto defoliado y con buen color por parte de varios compradores polacos y húngaros, que luego suministran a las cadenas de supermercados. La demanda es muy alta, pero los precios no son desorbitados. Actualmente, los precios de partida son de unos 0,70-0,75 euros/kg para los productos procesados, de los cuales 0,40 euros/kg son para el productor".
Daniele y Nadia Martucci
"Afortunadamente, estamos gestionando muy bien este boom de pedidos, ya que disponemos de una gran cantidad de fruta de calibre III y IV en los árboles, que es la preferida por la mayoría de los mercados europeos, reservando así las clementinas de calibre I y II para el mercado italiano".
"Conocemos la reputación no muy positiva de algunas empresas de Europa del Este en cuanto a litigios e impagos. Por eso, especialmente en el caso de los nuevos clientes, pedimos el pago por adelantado, antes de que salga la mercancía. Sin embargo, no metemos a todo el mundo en el mismo saco, entre otras cosas porque llevamos décadas trabajando con empresas polacas y húngaras que son grandes ejemplos de espíritu empresarial".
"Este año empezamos a exportar con unos 15 días de retraso debido a la lentitud en la maduración de la fruta. La fuerte caída de las temperaturas de la semana pasada en las zonas jónicas ha acelerado el envero de la fruta (cambio de color de verde a naranja), lo que nos ha permitido suministrar mayores cantidades de cítricos con una coloración homogénea. Esperamos un nuevo aumento de los pedidos a partir del próximo fin de semana debido a la proximidad de las vacaciones de Navidad. Si el tiempo es favorable, podremos vender clementinas hasta finales de febrero".
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Via Chiatona,
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