La campaña de fresa española, que arrancó en Huelva con las variedades más tempranas en noviembre, avanza con sensaciones más positivas respecto a la temporada pasada en las mismas fechas.
“Empezamos con la variedad precoz San Andreas y en estos momentos estamos recolectando Fortuna y empezando también con Rociera”, cuenta Loli García, directora comercial de Grufesa. “La meteorología ha influido de manera óptima en la cosecha hasta ahora. Hacía tiempo que no veía una calidad así de buena al comienzo, tanto en la fase de desarrollo de la fruta como en la recolección. Los calibres y la coloración son inmejorables”, afirma.
De acuerdo con la directora comercial, “los mercados están absorbiendo bien los volúmenes dado el equilibrio entre oferta y demanda, mientras el mercado nacional ha retomado su posición, gracias a que la pandemia está más controlada que en otros países. En general, tanto la demanda como los precios están siendo buenos, dado que, a diferencia del año pasado, en el que había toques de queda y la restauración estuvo prácticamente cerrada, ahora el canal horeca sí está funcionando. Vemos que esto está animando más a los consumidores, ya que se respira más optimismo en los mercados. Por otra parte, no estamos notando una especial competencia de Marruecos ni de Egipto en los países a los que exportamos”.
La cooperativa productora y comercializadora de Moguer, Huelva, está formada por 40 socios que trabajan las alrededor de 500 hectáreas de cultivo que se traducen en 27.000 toneladas de fresas, así como arándanos y frambuesa.
La superficie plantada de fresa en Huelva será apenas un 1% más elevada respecto al curso pasado, mientras que la de arándanos sube casi un 7% y las de frambuesa cae un 8% debido a la creciente competencia con otros orígenes y una mala climatología que causó importantes daños al cultivo.
“Aunque la fresa sigue siendo de lejos nuestra referencia y especialidad, hemos reducido un poco la superficie, así como de frambuesa, para seguir creciendo en arándano”, explica Loli García. “Empezamos hace unos años a apostar por el arándano, realizando una diversificación varietal importante que se está traduciendo en un aumento de volúmenes y un calendario extenso y sin solapamientos. La semana que viene empezaremos ya a recolectar y vender los primeros arándanos de la temporada”.
Se espera que la oferta de fresa vaya aumentando a finales de diciembre y principios de enero, fecha en las que suele bajar un poco el consumo tras las celebraciones navideñas, pero que vuelve a regularse a finales de enero.
Por lo que respecta a los problemas de mano de obra, Loli García señala que “la situación también es mucho mejor que en el inicio de la campaña pasada, en la que hubo bastante incertidumbre. Este año parece que tendremos más disponibilidad de trabajadores, aunque en este sector siempre se requiere más mano de obra”.
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