La temporada egipcia de batata suele empezar a finales de julio y terminar en febrero todos los años, por lo que el final de la temporada actual está cerca. Según Reda Ezz, fundador del exportador de productos egipcios All Fresh Egypt, la temporada se ha visto afectada por las repercusiones de la COVID-19 durante toda la temporada. "El agricultor, el exportador y el importador han estado esperando a que mejoraran las condiciones del mercado en Europa y a que disminuyeran los costes de cultivo y los de exportación, desde los materiales de envasado hasta los disparatados precios de envío, para conseguir mejores precios de venta, pero no se ha conseguido en muchos casos".
Ezz afirma que los costes de producción de las batatas están causando problemas a los agricultores, que parecen estar disminuyendo la producción para la próxima temporada. "La agricultura, los precios de envío y los materiales de envasado se han vuelto casi imposibles con los precios de venta del producto en el extranjero. Con el comienzo de la preparación de la tierra para el cultivo de la próxima temporada, que se cosechará a finales de julio, muchos pequeños agricultores están abandonando parte de la producción debido a los elevados costes de la agricultura en estos momentos (aspectos como la mano de obra, los pesticidas y los fertilizantes agrícolas). Al mismo tiempo, los grandes agricultores han reducido la superficie cultivada cerca del 30% por la misma razón".
Además de los retos de la temporada, los volúmenes globales de exportación también son inferiores a los del año pasado, según explica Ezz: "Uno de los aspectos positivos de la batata egipcia en los últimos años es el cultivo de nuevas variedades. Entre ellas, Bellevue y Evangeline, que, junto a Beaugard, son solicitadas por los mercados europeos. Estas variedades han demostrado su éxito en las condiciones egipcias y en la tierra egipcia. Egipto ha exportado unas 113.000 toneladas de batatas en lo que va de temporada, y esta cifra se ha reducido en un 30% en comparación con el año pasado, debido a la inflación y la recesión que han dominado los mercados europeo e inglés".
"Como empresa, All Fresh Growers exportó el año pasado 8.000 toneladas, de primera y segunda categoría, y este año el volumen ha disminuido a 5.000 toneladas, por las razones mencionadas anteriormente. Esto afectará negativamente a la oferta del producto en los próximos años. Todos esperamos que las condiciones vuelvan a la normalidad para que el agricultor pueda plantar, para que el exportador pueda hacer sus envíos y el para que el importador venda sin pérdidas; y que nadie tenga que soportar estas dificultades durante más tiempo del necesario", concluye Ezz.
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Reda Ezz
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