El Sistema de Alerta Rápida para Alimentos y Piensos (Rapid Alert System for Food and Feed, RASFF) ha notificado la retirada del mercado, por parte de las autoridades de Países Bajos, de naranjas importadas de Marruecos con destino a supermercados neerlandeses.
El organismo detalla que en las naranjas se encontraron residuos del insecticida clorpirifos en una proporción de 0,017 mg/kg – ppm cuando, además de estar totalmente prohibido su uso en frutas y hortalizas desde el 6 de diciembre de 2019, el límite máximo de residuos (LMR) está fijado en 0,01 mg/kg – ppm.
Gracias a la intervención de las autoridades fronterizas neerlandesas, las naranjas no llegaron a poner en peligro la salud de los consumidores. Este hecho que ha sido calificado como grave por el RASFF.
Fuente: hortoinfo.es