La escalada de los costes de producción desde el estallido del conflicto en Ucrania ha suscitado la preocupación en el sector de la fruta extremeña, ya que, como ha explicado el gerente de la Asociación de Fruticultores de Extremadura (Afruex), Miguel Ángel Gómez, comienza a ser “insostenible”.
Gómez ha recordado que la mayoría del transporte de la fruta extremeña se realiza por carretera, y que se precisan además elevados costes de electricidad para la refrigeración, gastos que en la actualidad son “enormes”. Ante estas circunstancias, “o se repercuten estos costes o las empresas pueden quebrar”, ha advertido.
Asimismo, ha recordado que la fruta “no puede parar temporalmente”, al contrario que otros sectores económicos o incluso otros ámbitos agrarios, pues “se trata de un producto que tiene unos determinados periodos de producción”. “Dejar la fruta en el campo sería, por tanto, un desastre para los agricultores y para las empresas, así como para el empleo en la región”.
El sector reclama medidas de ayuda
En este escenario, el sector aboga por reducciones de impuestos o deducciones para que la actual situación “no sea una ruina para las empresas” y, a su vez, para que no se vea afectado el empleo en un cultivo que es “el principal generador de mano de obra del campo extremeño”, con más de cinco millones de peonadas.
Fuente: interempresas.net