La Cooperativa Sant Bernat de Carlet estima que la cosecha de esta campaña representará un mínimo histórico. El presidente de la entidad, Álvaro Nogués, estimó ayer que en el último año se han arrancado otras 1.500 hanegadas de frutales en la que ha sido y sigue siendo la principal zona productora de la Comunitat Valenciana, agudizando una tendencia de los últimos años que ha reducido la superficie de cultivo a 3.500 hanegadas cuando hace apenas tres años se contabilizaban cerca de 9.000.
Si bien la cooperativa de Carlet llegó a alcanzar los 30 millones de kilos de fruta en los años noventa, la cosecha este año se estima en unos 4 millones de kilos, a la espera de confirmar la merma que provocarán las persistentes precipitaciones de marzo que podrían pasar factura; en el albaricoque y el paraguayo sobre todo, pero también en la nectarina y el melocotón.
"La fruta de hueso acabará desapareciendo en Carlet, y no solo por el factor precio, se trata de un cultivo que depende mucho de la mano de obra y no hay gente en el sector con la disponibilidad que requiere de forma puntual, no veo futuro a la fruticultura", señaló Nogués, mientras comentaba que resulta "imposible" competir con los productores de Murcia, donde no solo han desarrollado estructuras más eficientes sino que, además, los convenios colectivos regulan retribuciones inferiores a las que existen en la Comunitat Valenciana.
Fuente: levante-emv.com