Desde que a finales de la década de los años 50 del siglo pasado se comenzaran a cultivar champiñones de manera pionera en la comarca de La Manchuela, este sector de la agricultura ha ido creciendo y tecnificándose en Castilla-La Mancha hasta convertir a la comunidad autónoma en la mayor productora de champiñones y setas de España; de hecho, según datos del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, en Castilla-La Mancha se producen más del 50% de los champiñones del país y casi el 61% del resto de hongos cultivados. Y allí se ubica Neofungi, el mayor productor de champiñones y setas para consumo en fresco de la península ibérica.
“Neofungi es una cooperativa de segundo grado compuesta por las cooperativas de primer grado Champinter y Mercajucar. Cultivamos champiñón, portobello, seta ostra, shiitake y eriingy, nuestra producción anual está por encima de los 30 millones de kilos”, explica Sergio Pinto, de la entidad con sedes en Villamalea y Villalgordo del Júcar, Albacete.
“Seguimos un modelo de economía circular: producimos la semilla en el laboratorio de micelio, que más tarde sembraremos en uno de los procesos que hacemos en nuestra planta de compost. De hecho, contamos con la planta más moderna de la península ibérica y una de las más punteras de Europa. Dicho compost lo trasladamos a los cultivos climatizados, donde controlamos la humedad, la temperatura y el CO₂ en cada momento del cultivo. Una vez terminado el ciclo de cultivo y agotado el compost, lo procesamos en la planta de reciclado para obtener abonos que se destinarán posteriormente en agricultura; es decir, le devolvemos al campo en forma de abono lo que el campo nos dio en forma de paja de cereal –materia prima principal para la fabricación del compost–. Además, disponemos de una conservera donde presentamos a nuestros clientes los diferentes hongos en conserva”.
Aumenta el consumo de portobello
El champiñón sigue siendo el hongo cultivado más consumido en España, seguido de la seta de ostra, aunque el portobello ha experimentado un interesante incremento en la demanda en los últimos años, destaca Sergio. “Hace unos 10 años, el porcentaje de consumo de portobello respecto al champiñón blanco en el mercado nacional no llegaba al 1%, mientras que hoy en día esa proporción ya está en el 15%”.
“En Estados Unidos el porcentaje de consumo de portobello respecto al champiñón está en un 50% y en Europa en torno a un 30%, lo que nos hace ver que este producto tiene aún mucho camino por recorrer y un potencial de crecimiento en el mercado nacional”.
“Con respecto al resto de los hongos, la crisis no ha ayudado a que ciertas variedades como el eriingy y el shiitake crezcan en consumo, aunque es necesario señalar que son hongos muy importantes no solo por sus características culinarias o sus bondades para el paladar, sino también por sus beneficios para la salud”, señala Sergio. “El shiitake es auténtica ‘medicina’ y, como tal, es básica en la alimentación oriental. Es más, es la seta más consumida en el mundo, excepto en los países del Mediterráneo”.
Costes de producción
La tecnologización y climatización de los cultivos de hongos comestibles ha permitido controlar los principales factores para su producción, y con ello, la posibilidad de suministrar a los consumidores a lo largo de todo el año toda una gama de productos saludables y de máxima calidad, muy versátiles en la cocina –lo pudimos comprobar en el showcooking de Neofungi de la pasada edición de Fruit Attraction, en la que un conocido chef español elaboró champiñones rellenos de licor de cereza y bañados en chocolate– y que suponen una interesante fuente de proteínas de origen vegetal. Todo ello, además, se refleja en la tendencia creciente que desde hace años acompaña a su consumo.
Sin embargo, en estos últimos meses el cultivo de los hongos se está viendo muy afectado por la escalada de los costes energéticos, ya que “si hay un cultivo al que le afecta en mayor medida los aumentos en el coste de la electricidad y del gasoil, ese está siendo el de hongos”, subraya Sergio Pinto. “La climatización requiere energía constante, así como la planta de producción de compost, por lo que en estos meses se han incrementado mucho los costes de producción. Por ahora se ha podido repercutir una parte de ese aumento en el precio final, pero la otra parte la está soportando el agricultor”.
“Esto ya está dificultando que se lleven a cabo ampliaciones y se pongan en marcha nuevos proyectos. Realmente, estamos a la expectativa de lo que va a pasar los siguientes meses si no somos capaces de repercutir la subida total en el precio de nuestro producto. Hay que recordar que, en esta zona de La Mancha, el cultivo de hongos contribuye a la generación de empleo y a la fijación de la población rural –nuestro sector, de hecho, hace que el paro sea muy bajo e incluso llega a ser nulo en muchos pueblos– y a que la población no tenga que dejar su territorio y trasladarse a buscar trabajo”.
Portobellos de estrella Michelin
Neofungi colabora con el mundialmente conocido chef Martín Berasategui, poseedor de 12 estrellas Michelin, entre otros múltiples reconocimientos internacionales, y recientemente galardonado con el premio Chef Mentor de la Guía Michelin España & Portugal 2022, a quien suministra el portobello que utiliza en sus restaurantes.
“Los consumidores pueden adquirir, asimismo, nuestros portobellos en las principales cadenas de la gran distribución española como en los principales mercados centrales del país. Además, a finales del mes de abril, en la feria Gourmet, presentaremos el nuevo proyecto de Neofungi: los nuevos champiñones rellenos microondables y horneables”, comparte Sergio.
Para más información:
Neofungi
Camino Quintanar s/n
02636 Villalgordo del Júcar, Albacete (España)
Tel.: +34 967 45 50 94
neofungi@neofungi.es
https://neofungi.com