Dada la fuerte demanda de aguacates, la disparidad entre las importaciones y las exportaciones en Estados Unidos se acentuará más todavía. Las exportaciones estadounidenses alcanzaron un máximo plurianual en 2013, impulsado por una fuerte producción nacional.
Desde entonces, una combinación de una producción nacional de plana a descendente y una vigorosa demanda interna han restringido las exportaciones estadounidenses, que también muestran el típico patrón de la alternancia productiva (ver el siguiente gráfico).
Las exportaciones de aguacate estadounidense a Canadá han descendido sustancialmente en el último quinquenio, pues los aguacates de California se enfrentan a la creciente competencia de la fruta mexicana en el mercado canadiense. Por otro lado, Corea del Sur y Japón se han convertido en los principales mercados de destino de los aguacates estadounidenses, con cerca del 50% de las exportaciones en el último par de temporadas.
Otros mercados asiáticos, como China/Hong Kong y Taiwán, siguen creciendo. Entre los mercados diversificados que reciben volúmenes de aguacates cada vez mayores de Estados Unidos figuran Kuwait, Malasia, Singapur y los Emiratos Árabes Unidos. Las exportaciones a los mercados asiáticos se han mantenido a unos volúmenes relativamente bajos, pero hay oportunidades considerables aún por aprovechar para la expansión de la demanda.
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Fuente: agfstorage.blob.core.windows.net