Unos científicos británicos han creado unos tomates que contienen provitamina D3, un precursor de la vitamina D. Las pruebas se llevarán a cabo al aire libre a partir de junio.
Aunque los tomates no contienen normalmente vitamina D, los científicos han conseguido forzar al tomate a producirla y almacenarla interviniendo en sus genes.
"Modificar genéticamente los tomates para que acumulen provitamina D3 en niveles superiores a las recomendaciones alimentarias podría mejorar la salud de muchas personas, sobre todo porque los tomates son un alimento ampliamente disponible y fácil de consumir", afirma Guy Poppy, profesor de Ecología de la Universidad de Southampton.
Fuente: francetvinfo.fr
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