Estados Unidos y otros países establecen límites máximos de residuos (LMR) en las frutas y hortalizas para diversos productos químicos, incluidos los plaguicidas que pueden utilizarse antes o después de la cosecha. Los materiales deben estar etiquetados para su uso en el cultivo de interés y utilizarse solo de acuerdo con las instrucciones de la etiqueta.
Aunque es poco probable que se superen los LMR de Estados Unidos cuando se siguen las instrucciones de la etiqueta, otros países que representan importantes mercados de exportación para los cítricos de Florida establecen sus propios LMR. Cuando esos LMR son más bajos que los de Estados Unidos, puede ser necesario modificar o suspender el uso de esos plaguicidas para no exceder las tolerancias del país. Las infracciones pueden llevar a rechazar cargas de producto, a restringir futuros envíos e incluso a aumentar los requisitos para todo el sector de un determinado mercado.
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