La Interprofesional de Melón y Sandía de Castilla-La Mancha han denunciado a través de un comunicado la “campaña de desprestigio” que hay contra estas dos frutas veraniegas y que, “desde hace casi un mes, inunda las redes sociales y los whatsApps”.
Según señala la entidad, esta campaña “que parece orquestada, busca el descenso de los precios en detrimento del productor y que ha propiciado fuertes campañas promocionales, convirtiendo al melón y a la sandía en los productos reclamo de las grandes superficies”.
La interprofesional aclara que “el alza de los precios fue algo puntual, derivado de la falta de producto en un momento dado, y que ya está totalmente normalizado”, y muestra su preocupación ya que se está a las puertas de que comience la campaña del melón y la sandía en Castilla-La Mancha. Por este motivo pide a las administraciones que actúen.
Por un lado, la organización regional exige que se cumpla la Ley de la Cadena Alimentaria y se persigan las prácticas desleales que vayan en contra de esta. Y es que, “la Ley de la Cadena de nada sirve si no se cumple, y la mayor indefensión la tiene el primer eslabón”. Por otro lado, la interprofesional solicita apoyo a la Consejería de Agricultura para que ésta ponga en marcha una campaña de estímulo al consumo, para así ayudar al sector y “contrarrestar las difamaciones que se están vertiendo sobre el melón y la sandía, cuya imagen están encuadrando como si de productos de lujo y delicatessen se trataran”.
En este sentido, el presidente de la interprofesional, Cristóbal Jiménez, defiende que “el melón y la sandía de La Mancha son frutas de temporada, de gran calidad, con precios altamente competitivos con respecto al resto de frutas, de grandes cualidades y valor nutritivo en consonancia con la dieta mediterránea y cultivos muy sociales, que generan muchos puestos de trabajo”. Además, incide en que “el sector ha hecho hasta el momento todo lo que podía hacer para que no se desplomen los precios: sembrar casi mil hectáreas menos de melón y sandía en Castilla-La Mancha y trabajar para obtener un producto de gran calidad, como cada año”.
Sin embargo, la interprofesional señala que los productores no han podido hacer nada contra el incesante aumento de los costes de producción. Jiménez incide en que “todos los eslabones de la cadena alimentaria deben tener sus márgenes comerciales, pero no a costa del productor”. Recuerda que “en la campaña pasada hubo unas pérdidas de 4.000 euros por hectárea, y esto no se puede repetir porque sería la ruina del sector”. “Estamos ante una campaña importante, con mucho dinero invertido; pero necesitamos ayuda para incentivar el consumo, porque estimamos que las ventas se están reduciendo sobre un 40% con respecto a una campaña normal por estas fechas”.
Fuente: eldiario.es