Según Hans Lehar, director general de OGA/OGV Nordbaden, las ciruelas y las ciruelas damascenas se han consolidado como un pilar importante para la empresa, además de los espárragos, el maíz dulce y la fruta blanda. "En esta área, nos hemos desarrollado muy fuertemente en los últimos años. La temporada se extiende hasta septiembre/octubre, posiblemente incluso noviembre. En el proceso, también compramos bienes importados de Europa del Este, que hemos estado comercializando a gran escala durante años", dice Lehar. También habla sobre el uso necesario de plásticos en la industria alimentaria y por qué cree que es necesaria una solución a escala europea para la protección del clima y las normas de sostenibilidad en el sector hortofrutícola.
Foto: OGA/OGV Nordbaden eG
2.000 toneladas de ciruelas de Europa del Este
La empresa obtiene hasta 2.000 toneladas a través de sus propias operaciones en Serbia y Polonia, e importando el producto de países como Hungría, Bosnia-Herzegovina y Moldavia. "Hace unos años, comenzamos un proyecto con ciruelas de los Balcanes junto con la Sociedad Alemana para la Cooperación Internacional (GIZ). Ayudamos en la certificación de las explotaciones y pudimos establecer una gran cantidad de contactos. Siempre hemos disfrutado de una buena relación de trabajo con estas fincas agrícolas. Estamos planeando ampliar nuestra gama de productos con algunos de los productores", continúa Lehar.
4.000 toneladas de ciruelas de Alemania
La empresa ofrece hasta 4.000 toneladas de ciruelas de su propia producción alemana. "Vendemos las ciruelas en varios envases tanto al retail como a mayoristas. En algunos casos, también servimos a empresas deshuesadoras como una etapa preliminar para las pastelerías. Una vez se planteó un procesamiento propio hace años. Nos abstuvimos de hacerlo, ya que era una rama de negocio completamente nueva y requería altas inversiones. Actualmente no tenemos ninguna mercancía procesada en ese sentido, aparte de los espárragos pelados, que ya nos son suministrados pelados por los cultivadores", dice Lehar. Según Hans Lehar, si bien está menos preocupado por el suministro de productos, las nuevas demandas del comercio, potencialmente, pueden generarle problemas a la industria.
El director general Hans Lehar con una caja de maíz dulce
Llamamiento a favor de normas de protección y sostenibilidad del clima uniformes y a escala europea
Lehar dice que le preocupa que los proveedores puedan enfrentarse a una situación similar en las cuestiones de sostenibilidad y protección del clima a la que se han enfrentado anteriormente en la cuestión fitosanitaria. "Es mejor encontrar una solución industrial a nivel europeo a que cada grupo minorista defina de nuevo sus propias especificaciones y exija su implantación a los proveedores", opina Lehar. "Hemos preguntado a nuestras asociaciones a nivel estatal y nacional si ya hay actividades correspondientes. Desde enero, Freshfel Europe ha trabajado en Bruselas para encontrar una solución industrial para el sector de las frutas y hortalizas a nivel europeo, con la que todas las partes involucradas puedan trabajar de manera uniforme y significativa".
"Tenemos que trabajar en colaboración con nuestros clientes para encontrar una solución que se adapte a las circunstancias específicas del sector hortofrutícola. Me gustaría ver un consenso entre los productores/proveedores y el comercio sobre estas cuestiones fundamentales y no tener que enfrentarnos a diferentes especificaciones y plazos. Todos deberíamos haber aprendido de los problemas de las diferentes definiciones de los principios activos fitosanitarios admisibles. Y aquí es donde hacemos un llamado a las asociaciones industriales y al retail".
Imagen: OGA/OGV Nordbaden eG
Poner en primer plano la etiqueta "Hecho en Alemania"
Lehar también es crítico con el enfoque de las estrategias de marketing que ponen más énfasis en las regiones individuales y los estados federales en lugar de promover los productos alemanes en su conjunto. "Casi todos los estados federales tienen su propia agencia o compañía de mercadeo; cada uno quiere crear su propia marca. Creo que ahora esto es completamente excesivo, y la competencia que ha surgido entre las regiones está perjudicando a los productores. Se necesitan diferentes embalajes, películas y etiquetas, y ya no es posible realizar pedidos en cantidades mayores que ahorren costes. En el caso de las mercancías importadas, no importa en absoluto de qué región provengan las mercancías. Allí se habla de fresas españolas, uvas de Italia o arándanos argentinos".
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Creo que en muchos casos no es preciso afirmar que el consumidor prefiera la regionalidad. Creo que si le preguntáramos si prefiere el origen alemán en las encuestas, tendríamos los mismos resultados. El precio y la calidad son decisivos. Si además el país de origen es correcto, todo está bien. Nuestra Asociación Federal de Organizaciones de Productores de Frutas y Hortalizas está tomando el camino de promover a Alemania en su conjunto y de volver a generar conciencia sobre la etiqueta 'Cosechado en Alemania'. Sería deseable que se llevara a cabo un proceso de replanteamiento en el sector", expone Lehar.
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