¡Suscríbase a nuestra newsletter y manténgase al día con las últimas noticias!

Suscribirse Ya soy suscriptor

Está usted usando un software que bloquea nuestros anuncios.

Ya que publicamos noticias gratuitamente, dependemos de los ingresos de nuestros banners. Por favor, le rogamos que desactive su bloqueador de anuncios y recargue la página para poder seguir visitando esta web.
¡Gracias!

Haga clic aquí para leer la guía de cómo desactivar su bloqueador de anuncios.

Sign up for our daily Newsletter and stay up to date with all the latest news!

Suscripción I am already a subscriber

La falta de lluvias y la sobreexplotación del acuífero reducen la principal laguna de Doñana a un "pequeño charco"

Los investigadores ya hablan del "peor episodio de estrés ambiental" en el Parque Nacional de Doñana desde hace décadas y piden a los gobiernos –a la Junta de Andalucía y al ministerio de Transición Ecológica– un acuerdo que evite pérdidas que pueden ser irrecuperables en el parque, donde la laguna de Santa Olalla, la última masa de agua permanente que quedaba, se ha visto reducida a un "pequeño charco", explica a ARA el director de la Estación Biológica de Doñana, Eloy Revilla.

Detrás de esta situación crítica hay varias causas que han coincidido en el tiempo. Por un lado, la sequía –"hace diez años que las precipitaciones aquí están por debajo de la media", avisaba Revilla hace unos días a Efe– y por otro, la sobreexplotación que soporta el acuífero subterráneo a raíz de unos pozos ilegales que riegan explotaciones intensivas de fresas y frutos rojos y de la necesidad de abastecer a la cercana población de Matalascañas; un pueblo de pocos miles de habitantes, pero que supera los 100.000 durante la temporada de veraneo.

El Parque Nacional de Doñana ya ha vivido periodos de sequía extrema en 1983 y 1995, pero esta vez es diferente; Revilla recuerda que España tiene desde el año pasado una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de la UE (TSJUE) que la condena por no haber protegido lo bastante este espacio de humedales, tesoro de la biodiversidad. De hecho, las autoridades europeas ya han enviado un ultimátum antes de las sanciones si el Gobierno andaluz mantiene sus planes de aumentar el regadío a la zona legalizando las explotaciones que todavía hoy riegan sin autorización.

El proyecto de desconectar la urbanización de Matalascañas del acuífero y abastecerlo de otras fuentes lleva tiempo sobre la mesa de las administraciones; además, a pesar de que la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir ha cerrado decenas de pozos ilegales, no han desaparecido. Ante esta problemática, el consejero de Sostenibilidad y Medio ambiente andaluz, Ramón Fernández-Pacheco, hacía un llamamiento este lunes a llegar "a un gran acuerdo" por Doñana. Defendía que hay que garantizar el abastecimiento de agua para el regadío y para la población cercana al parque, un agua que hoy se saca del acuífero, y lanzaba la pelota al tejado del ministerio. "Se necesitan obras, infraestructuras hídricas, que son responsabilidad del gobierno español", decía. Sobre el proyecto de ley para ampliar el regadío, Fernández-Pacheco echaba pelotas fuera: "Se inició en el Parlamento y será allá donde se tendrá que dilucidar".

 

Fuente: es.ara.cat

Fecha de publicación: