¡Suscríbase a nuestra newsletter y manténgase al día con las últimas noticias!

Suscribirse Ya soy suscriptor

Está usted usando un software que bloquea nuestros anuncios.

Ya que publicamos noticias gratuitamente, dependemos de los ingresos de nuestros banners. Por favor, le rogamos que desactive su bloqueador de anuncios y recargue la página para poder seguir visitando esta web.
¡Gracias!

Haga clic aquí para leer la guía de cómo desactivar su bloqueador de anuncios.

Sign up for our daily Newsletter and stay up to date with all the latest news!

Suscripción I am already a subscriber
Crisp escoge deliberadamente reducir los márgenes de la banana

Un supermercado holandés exclusivamente "online" toma el control de su propia cadena de la banana

Para los retailers, las bananas son uno de los productos hortofrutícolas más importantes. Aun así, es también un grupo de productos de alto riesgo en lo que se refiere a los abusos en la cadena y al impacto medioambiental. El supermercado holandés Crisp, exclusivamente online, quiere alejarse de esto. Y lo hará en detrimento del margen del producto, como reconoce su directora de la categoría de frutas y hortalizas, Biorella Hooi.

También para Crisp, las bananas son un éxito de ventas en el departamento de fruta. Muchos supermercados utilizan las bananas y sus bajos precios para atraer a los consumidores. "Siempre hemos desconfiado de esto; nunca hemos tenido bananas a un euro. Al final, hay alguien más que paga el precio de esto, y nueve de cada diez veces, es el agricultor".

Los precios de las bananas de Crisp son acordes a los precios medios de los supermercados; tan solo incorpora una pequeña prima. Según la web Supermarketscanner, esos precios fueron de 0,30 € por banana normal a 0,40 € por banana ecológica de comercio justo a mediados de julio. Las bananas que Crisp importa cuestan 2,19 € por racimo de cinco frutas, es decir, 0,44 € la fruta. Esos 0,04 € más por banana permiten a los consumidores contribuir a una cadena más sostenible.

"Tenemos colaboraciones abiertas con todos los eslabones de nuestra cadena, todos los costes son transparentes y esa información se comparte. Lo tenemos todo en cuenta, incluso cosas como los precios al productor, la compensación de CO₂, la logística de cultivo y los costes de maduración, así como lo que pagamos por el recogido de pedidos y los repartos. Basándonos en ese precio de compra, fijamos un precio de venta que no se desvíe demasiado del de los precios de mercado. Eso significa que vendemos nuestras bananas con un margen solamente un poco inferior que antes. Nuestro fin último es mejorar nuestro surtido de frutas y hortalizas, hacer las cosas mejor para el mundo y ofrecer a los consumidores un producto sabroso y responsable", explica Biorella.

Estas bananas Crisp sustituyen a las bananas Turbana ordinarias y siguen el ejemplo del verdadero precio de las bananas BeFrank. Frankling Ginus, de BeFran, exdirector de Chiquita, quería que la cadena de la banana fuera justa y transparente, pero dejó de intentarlo a finales del año pasado. "Cuando BeFrank anunció su final, aprovechamos la oportunidad de ver cómo abastecernos nosotros mismos de la mejor alternativa".

"Es un paso estresante, en especial cuando los costes logísticos van en aumento y con el euro en trayectoria desfavorable frente al dólar", dice Hay. "Podría parecer un proceso más complejo, pero los beneficios lo compensan. Hemos descubierto un socio excelente en Agrofair, y colaboraremos estrechamente como socios de la cadena".

La maduración es un paso vital para el sabor final de las bananas. Esto incluye la cooperación con una empresa local. "Puedes encargar tu compra dos semanas antes en nuestra app. Gran parte de esa maduración se basa en la intuición, y la otra parte se estima", concluye Biorella.


Crisp
info@crisp.nl
www.crisp.nl   

Fecha de publicación: