Los altos costes de producción, los de la energía y de la mano de obra en particular, están causando mucha inquietud en el sector de las setas holandés. Según Tom van Wijk, presidente del departamento de Champiñones de LTO, la organización patronal para el sector agrícola holandés, el coste de producción de los champiñones ronda actualmente los 2 euros el kilo.
Banken Champignons, la empresa líder del mercado en los Países Bajos, también se enfrenta al aumento de los costes energéticos. "En el cultivo de setas se imita el tiempo otoñal, por lo que es necesario generar la temperatura adecuada. En 2022 los costes energéticos fueron muy elevados, ya que hubo períodos bastante largos de temperaturas muy altas. La limpieza térmica de las áreas de producción también ha supuesto un sobrecoste por el aumento del precio del gas", comenta Rob Banken.
"Además, el aumento de los costes de la energía y del transporte también se repercute en los costes de las materias primas, lo que se traduce en un enorme incremento del coste de producción", continúa Rob. "Además de todo esto, los costes de la mano de obra siguen aumentando y es cada vez más difícil encontrar trabajadores, acomodarlos y transportarlos a las instalaciones de producción. Los productores tendrán que recibir precios más altos por sus productos; de lo contrario, esperamos una escasez de champiñones frescos en el mercado".
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Rob Banken
Banken Champignons
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