Con la última incautación de droga en la vía Guayaquil-Posorja, donde la policía halló un cargamento de estupefacientes en el interior de un contenedor cargado con cajas de banano de un tráiler abandonado tras volcar en la carretera, los decomisos de droga en Ecuador, al 29 de septiembre de 2022, ya ascienden a 151 toneladas, 20 más que las decomisadas en el mismo periodo del 2021.
Una gran parte de las incautaciones se ha llevado a cabo concretamente en Guayaquil y, en ese sentido, el sector exportador de banano es el más golpeado por las contaminaciones de droga, ya que es el producto de mayor volumen y frecuencia que se moviliza en los puertos de la ciudad; unos 7.000 contenedores semanales, especifica Richard Salazar, presidente del gremio.
Además de la inversión en vigilancia satelital y en la custodia de los cargamentos mediante guardias privados, cuando se produce un decomiso de droga, las autoridades retienen todo el cargamento como evidencia, lo que termina dañando la fruta y generando pérdidas a los exportadores. "Nadie asume el costo [de la pérdida], cada contenedor cuesta 12.000 dólares", sostiene Salazar. "Estamos preocupados porque el narcotráfico sigue y vemos que solo los exportadores solventamos el problema, no los puertos ni las navieras".
Cabe indicar que Guayaquil cuenta con 12 terminales privadas y desde esta ciudad portuaria se mueve el 85% de las exportaciones no petroleras de Ecuador, alrededor de 25 millones de toneladas de carga al año; y revisar unos 2,4 millones de contenedores al año "es una tarea titánica", reconocen en Antinarcóticos.
"Nuestro país dejó de ser centro de acopio para constituirse en plataforma de distribución de droga a nivel internacional", había reconocido el general Giovanni Ponce, hasta hace poco jefe de antinarcóticos. Lamentablemente, según la oficina de Naciones Unidas para la lucha contra las drogas, el país se ubica como el tercero del mundo con más cocaína incautada.
Fuente: ecuavisa.com